Comenzó como un surruro, como suelen comenzar los relatos sobre las intiminades personales. Durante unas semanas, dentro de un grupo secreto de la red social Facebook al que se iban sumando personas solo por invitación, decenas y luego cientos de mujeres compartieron sus experiencias de acoso.

De acoso. Hostigamientos. Delitos. Violencia. Desde el "piropo" en la calle hasta la violación, actos despreciables narrados por las víctimas, cansadas de callar.

El surruro se convirtió en grito. La noche del miércoles, tal como lo habían anunciado, se creó la comunidad virtual pública 'NoCallamosMás', en las redes Facebook y Twitter (@nocallamosmas), que ya suman más de 2.500 seguidores.

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#NoCallamosMas #PrimerAcoso la sociedad justifica las agresiones de los machos que reproduce. pic.twitter.com/fKcVqlRWlS

Ahí se comparten públicamente historias de acoso, previa autorización de la víctima. Y resaltan: Una víctima que no debe callar más, que no debe sentir vergüenza. Ellas gritan, porque quien debe sentir vergüenza es quien acosa, quien lastima, quien te ataca.

La comunidad virtual se presenta como una iniciativa para evidenciar el acoso y pedir apoyo a todos los usuarios para difundir el contenido y generar acciones que erradiquen este mal.

Por ello hacen un llamado con estas palabras: "Romper el silencio es imprescindible, ya que lo único que hace es proteger a los agresores, invisibilizar una realidad que existe y nos genera una sensación de asfixia. Romper el silencio por todas las mujeres, niñas y niños que han vivido algún tipo de violencia y abuso. Para que sepan que no están solos, que no es su culpa y que sí se puede salir de la violencia". (I)