“Se acabó todo, hasta aquí llegamos”. Fue el comentario de María Teresa Nazareno, a las 02:11 del 19 de diciembre, cuando un sismo de magnitud 5,8 en la escala de Richter sacudió la provincia de Esmeraldas, y destruyó varias casas, sobre todo en Atacames y Tonsupa. La suya, en el barrio Rey David de la última localidad, quedó a punto de desplomarse. Ayer, luego de una inspección, le notificaron que será derribada.