La hospitalidad es una de las características que se asocian al guayaquileño. Y el Cabildo planea que esa cualidad quede expresada a través de una obra escultórica, que refleje una ciudad cosmopolita, generosa, receptiva, que abre sus puertas al país y al mundo.

A esta obra se la llamará el Monumento a la Hospitalidad Guayaquileña y para ella se destinarán 620 mil dólares.

Estará representada por dos manos de más de 13 metros de largo cada una, fundidas en aluminio, que formarán un conjunto escultórico a manera de arco, de más de 26 metros de ancho, suspendido en el aire a 10 metros de altura.

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Las manos estarán sostenidas por una estructura central en forma de “V” con dos brazos metálicos de aproximadamente 17 metros de alto.

Esta obra artística estará a cargo del escultor Édgar Cevallos y se instalará frente al aeropuerto, indica Wilfrido Matamoros, de la fundación municipal Guayaquil Siglo XXI. (I)