Un conversatorio marcado por la risa de los asistentes ante las bromas de los panelistas fue lo que se vivió ayer durante un encuentro con caricaturistas realizado en Guayaquil y que contó con la presencia de Xavier Bonilla (Bonil), Francisco Cajas (Pancho Cajas) y Joselo Romero (Joseph), encargados de poner la nota de humor en los diarios EL UNIVERSO, El Comercio y Expreso, en su orden.

Ellos fueron invitados por la Asociación de Comunicadores Sociales, Periodistas Profesionales y Afines del Ecuador (Asocope), para participar en el foro ‘El poder de la satírica, el humor y la libertad de expresión’, en el Museo Municipal.

Durante sus intervenciones los caricaturistas contaron sus experiencias realizando lo que calificaron como “humor político”, al cual consideraron como ‘bueno’, ya que es la forma de mostrar lo malo, pero de una forma divertida.

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Bonilla calificó al “humor político” como una defensa personal en la que “los golpes de karate consisten en las sonrisas encargadas de señalar los errores y los exabruptos de quienes están en el poder”.

Como anécdota recordó un dibujo de Francisco Andino, uno de los organizadores del evento, cuando era ministro de Salud, titulado ‘El que se pica pierde’ y en el que se lo ve dentro de un preservativo.

“Hoy no podría hacer una caricatura de ese tipo. Antes existía tolerancia...”, expresó.

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También informó que realizará una selección de sus dibujos de expresidentes que subirá a las redes sociales y les pondrá la leyenda “Ninguno de ellos me mandó a la Supercom”, frase que hizo reír a los asistentes.

Cajas reconoció que ser caricaturistas no es solo saber dibujar, sino también tener cierta dosis “de político” y “de maldad”, pero en el buen sentido, para hacer reír a través de sus viñetas.

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“Hay limitaciones, las cartas de aclaración y las sanciones para quienes hacemos este oficio cada día son más”, expresó, pero hizo un llamado a continuar con el trabajo y a seguir usando su lápiz.

“No es lo mismo fijarnos los límites a que nos fijen los límites, eso no es libertad”, dijo.

Para Joseph, los dibujantes han salido del anonimato, pero afirmó que les están cortando las alas, pues “cuando llega la musa de inspiración siempre se cruza la Supercom”. (I)