'Médicos del Mundo' denuncia racismo sanitario en Europa hacia indocumentados

La organización Médicos del Mundo denunció este martes en Madrid las crecientes dificultades de los inmigrantes indocumentados para acceder a servicios sanitarios en muchos países de Europa, entre las que destacó el caso de los menores y el de las embarazadas.

La organización presentó este martes el último informe de la Red Internacional de Médicos del Mundo sobre el acceso a la salud de colectivos vulnerables, elaborado con los datos de 16.881 pacientes en Bélgica, Suiza, Alemania, Grecia, España, Países Bajos, Francia y Reino Unido.

A nivel europeo, dos tercios de las inmigrantes embarazadas en situación irregular carece de acceso a la atención prenatal y, en el mejor de los casos, solo uno de cada dos niños ha sido vacunado contra el tétanos, hepatitis B o sarampión.

En algunos países, la tasa de vacunación es inferior al 30%, muy por debajo de la ratio de cobertura de la población general, en torno al 90%.

El estudio denuncia también que últimamente se están dando casos de denegación de certificados de nacimiento a los recién nacidos de madres que no han podido pagar los gastos de la atención del parto.

El presidente de Médicos del Mundo España, Álvaro González, recalcó que la situación de las mujeres embarazadas es "simple y llanamente inaceptable", y consideró que en época de crisis tanto ellas como los niños deberían estar especialmente protegidos.

El presidente de Médicos del Mundo Francia, Thierry Brigaud, recordó además que solo el 2,5% de los inmigrantes sale de su país por motivos de salud.

González recalcó que está demostrado que, a corto o medio plazo, la exclusión de colectivos y las barreras económicas al acceso a la salud suponen un incremento de costes por retraso en los diagnósticos, peor control de las enfermedades crónicas y por un incremento de los ingresos hospitalarios.

Ante la proximidad de las elecciones europeas, Médicos del Mundo pidió a los nuevos responsables políticos un acceso "inmediato" de todos los niños a las vacunas y de las mujeres a cuidados post-parto, así como el reconocimiento del derecho de acogida a personas gravemente enfermas.