La supresión de los directorios de las autoridades portuarias de Guayaquil, Manta, Esmeraldas y Puerto Bolívar y la entrega de sus funciones a la Subsecretaría de Puertos significaría el primer paso para establecer “una política homologada” en la administración de estas entidades, según la representante de la institución, Pilar Proaño.