El que no se haya incluido a los diarios Hoy y El Comercio en la queja por linchamiento mediático contra el periodista Diego Oquendo “le quitaron el carácter de denuncia (a lo que ella planteó ante la autoridad)”, afirmó ayer Sandra Correa, exministra de Educación en el gobierno de Abdalá Bucaram.

Ayer se realizó la audiencia de sustanciación en el primer caso de linchamiento mediático, al que le dio trámite la Superintendencia de Comunicación (Supercom) desde la vigencia de la Ley de Comunicación.

Este se inició basado en una denuncia de Correa contra Oquendo por supuestamente haber realizado una entrevista, en agosto pasado, con dos analistas sobre la posible inclusión de esa figura en el Código Orgánico Integral Penal (COIP).

Publicidad

En ese diálogo se tomó como ejemplo su caso, pues en el debate de la ley en la Asamblea ella planteó en la Comisión de Justicia que los medios la habían ‘linchado’ al publicar las denuncias de un supuesto plagio de su tesis doctoral y los detalles del proceso por supuestas irregularidades en la compra de mochilas escolares.

La demandante pidió la nulidad de la providencia en la que se llamó a la audiencia, pues la Supercom no incluyó a los medios citados. El argumento fue que la ley no es retroactiva.

“He demandado a tres, no a uno, como se ha hecho aparecer en los medios, exponiéndome a una revictimización. Pido un peritaje de análisis de contenido de los periódicos para que se establezca el concertaje, la reiteración y el propósito de desprestigiar y disminuir mi credibilidad: a Sandra Correa se tienen que dirigir como Sandra Correa, no como la copiona o la de la mochila”, increpó.

Publicidad

La exministra inició el proceso en febrero pasado, acogiéndose al artículo 26 de la Ley de Comunicación, que define al linchamiento como la difusión de información que “de manera directa o a través de terceros, producida de forma concertada y publicada reiterativamente, a través de uno o más medios de comunicación con el propósito de desprestigiar a una persona natural o jurídica o reducir su credibilidad pública”.

Los abogados de Oquendo, Juan Pablo Albán y Daniela Salazar, pidieron que se archive el proceso, pues no se configuraría el linchamiento mediático.

Publicidad

“No hay publicaciones reiteradas. No hay evidencia de un acuerdo de varios medios para recaer en linchamiento, no hay concierto de voluntades para afectar la imagen de Correa”, subrayó Albán.

Oquendo expresó que nunca ha iniciado una persecución en contra de nadie. “¿Cree que alguna vez hubo en mí la intención de atacarla, de avasallarla? Vuelva sobre su propio corazón”, le insistió.

La Supercom debe emitir en tres días la resolución final sobre esta demanda. La sanción prevista en la norma es una disculpa pública de quienes produjeron y difundieron la información, y sacarla, en el mismo espacio, en días distintos, tantas veces como fue publicada la información lesiva.

La excandidata presidencial Martha Roldós planteó antes una denuncia sobre linchamiento mediático, pero se archivó porque supuestamente no completó los requisitos.

Publicidad

Nunca he perseguido a nadie. Esa sola idea me estremece pues violentaría mis principios. Jamás he iniciado una persecución pese a que soy objeto de una ‘cacería’”.Diego Oquendo, radio Visión