Un grupo de científicos llegó a pensar lo peor al perder contacto con un robot. Durante ocho largos meses no obtuvieron respuesta. El equipo hacía su trabajo en las corrientes frías del este antártico cuando pasó al largo silencio.

En un “tramo crítico” el robot quedó atrapado bajo el hielo. Eso sucedió “bajo las plataformas de hielo de Denman y Shackleton”.

Publicidad

Su misión era “sumergirse, medir, ascender, enviar datos”. Pero, se suscitó el problema. Se perdió el rastro.

Un robot submarino logra captar imágenes del fondo de mar que han dejado a más de uno sin palabras

“Sin línea de comunicación, cada intento de emerger lo estrellaba contra la base helada”, explican en Gizmodo.

Publicidad

Pero, para sorpresa de los científicos, “en lugar de apagarse o perderse, el robor siguió activo”.

Reapareció el robot

El robot siguió midiendo “aunque nadie lo escuchara”. Aseguran que cada cinco días completaba un perfil completo —del fondo al hielo— aunque persistía la imposibilidad de avisar al exterior.

Detalla Gizmodo que el vehículo autónomo, del programa Argo, avanzó con sus registros de “temperatura, salinidad, presión, oxígeno, pH y nitratos desde el fondo del océano hasta la base misma del hielo”.

Finalmente, dio la mejor “fe de vida”. Reapareció 8 meses después.

Para la ciencia fue la mejor noticia: al volver trajo consigo “una de las colecciones de mediciones más valiosas jamás obtenidas en esta región del planeta”.

La ‘joya’ de investigación lograda por el robot

Imagen del site de Gizmodo

Los investigadores descubrieron que el robot “había logrado algo que hasta ahora parecía inalcanzable: el primer transecto (muestreo) completo bajo una plataforma de hielo del este antártico, una zona tan remota que ninguna misión tripulada podría explorar”.

De acuerdo con Xataka, al recuperar los datos, los científicos compararon esos puntos de impacto con los mapas satelitales que indican el espesor del hielo en la zona.

Robot submarino autónomo con forma de tiburón está diseñado para patrullar, mapear y proteger la red mundial de cables submarinos

Señalan que ha sido “como resolver un laberinto en 3D: si el robot chocó a 300 metros de profundidad, tenía que estar en un punto donde el hielo tiene 300 metros de grosor. Así reconstruyeron su trayectoria errática de casi 300 kilómetros”.

Gizmodo difunde los datos de los perfiles hechos por el robot del proyecto Argo y destaca los “contrastes”

1) Preocupación por el glaciar Denman:

Los datos detectan intrusión de agua templada circulando bajo el hielo, una señal preocupante. Pequeñas variaciones en el grosor de esa capa cálida podrían acelerar la fusión y conducir a un retroceso inestable del glaciar.

¿Qué es el glaciar Denman?

Indica Gizmodo que su cuenca alberga suficiente hielo como para elevar el nivel del mar global varios metros si colapsara completamente.

2) Normalidad en la plataforma de Shackleton

Parece relativamente estable. Por ahora eso es esperanzador. “No muestra exposición directa a aguas cálidas capaces de acelerar la fusión basal”. (I)

Te recomendamos estas noticias