La construcción es un sector que, en España, por ejemplo, “lo pagan bien en zonas costeras”. Aunque la albañilería siga pareciendo “cosa de hombres”, en ese país europeo les ha abierto las puertas a las mujeres, quienes no se intimidan al momento de pegar bloques ni cerámicas en pisos. ¿Has oído hablar de las albañilas o de cuánto ganan a diario?
En España, como quizás pase en otros países, en promedio los hombres albañiles pasan de los 45 años y a los hombres jóvenes no les llama tanto la atención, analizan en El Español.
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Es allí donde las mujeres han visto una oportunidad para trabajar.
Mujeres albañilas
Carolina es una de las albañilas que cuenta su experiencia en España. Desde hace más de dos décadas se dedicó al mundo de la informática y dice que tiene 16 años en la misma empresa.
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Ha sido con la albañilería que se ha dado a conocer. En la cuenta de TikTok @Ellaconstruye difundieron un video en el que esta mujer habla de su oficio “de ocio” y explica por qué a otras les irá bien si deciden seguir su consejo y entrar a la construcción.
Sabe que las mujeres a la hora de pensar cómo ganar dinero no tendrían este oficio en mente. Ellas preferirían abrirse camino como manicuristas, enfermeras, peluqueras u otro oficio tan o más “femenino”.
Pero es allí donde lanza el dato inesperado: “Una peluquera puede ganar 1.000 euros (1,172.25 dólares) al mes, mientras que alicatando (pegando baldosas en pisos) se pueden ganar 100 euros (117.22 dólares) al día”.
“Ya no estamos picando piedra”
Carolina tiene entre ceja y ceja la meta de formarse mejor y ser una albañila profesional. Se ha inscrito en cursos para avanzar.
Piensa que tanto los hombres como las mujeres deben formarse más. “Les animo a que se tecnifiquen”, la citan en El Español.
Reafirma a las mujeres que sí es posible ver la construcción “como una posibilidad laboral real”.
De acuerdo con el citado medio, “el sector de la construcción vive actualmente su ocaso” y agrega que, “en España, el 55% de los profesionales obreros son mayores de 45 años”.
Carolina insiste: “Las mujeres, en especial, debemos integrarnos plenamente en el mundo laboral de la construcción” (...) “No tenemos limitaciones biológicas para acceder a esos empleos”.
A las no muy convencidas les expresa: “Hay herramientas que facilitan las tareas más duras (…) Ya no estamos picando piedra”. (I)