Históricamente se ha conocido al perro como “el mejor amigo del hombre”; sin embargo, el gato también ha acompañado al ser humano desde la antigüedad. Todo esto ha avanzado hasta el punto en que actualmente se ha considerado a estos seres como algo más que una mascota, se les ha convertido en miembros de la familia.
Se considera que estos animales comparten emociones, costumbres y temores similares a las de los seres humanos, lo que conlleva a crear un lazo emocional profundo basado en confianza, afecto y complicidad mutua, reseña Infobae.
Publicidad
¿Cuáles son los rasgos que muestran las personas que hablan con sus mascotas?
1. Son empáticas
Más allá de tratar a sus mascotas como compañeros, conectan con ellas profundamente. Psicológicamente, la empatía es vista como la capacidad de comprender y compartir los sentimientos con las demás personas y en una investigación hecha recientemente por la psicóloga Lachlan Brown, se encontró que este es un rasgo abundante en los dueños de mascotas.
2. Alta inteligencia emocional
Quienes suelen hablar con sus mascotas, tienden ser conscientes de sus emociones y las de sus mascotas, de modo que puedan manejarlas efectivamente. De acuerdo al portal Global Editing English, estas personas pueden captar las emociones ajenas y responder a ellas adecuadamente.
Publicidad
3. Comodidad con la soledad
Las personas que tienen conversaciones con sus mascotas no tienen sentimientos de soledad, ya que hablen con ellas, comparten sus pensamientos y sentimientos, por lo que está presente el sentimiento de compañía, aunque no hubiese otro humano cerca, pues encuentran compañía y satisfacción emocional en su relación con sus mascotas.
¿Debería permitir que mi mascota duerma en mi cama?
4. Pensadores creativos
Una investigación de la Universidad de Chicago halló que hablar consigo mismo promueve la función cognitiva, por ende, hablar con una mascota puede ayudar a pensar innovadoramente.
5. Cultivadores de la atención plena
Otro rasgo de estas personas es que se centran en el presente y viven el momento, pues compartir estas conversaciones con el compañero silencioso permiten disfrutar del aquí y el ahora, sin enfocarse en el pasado o en el futuro.
6. Naturaleza nutritiva
Tener una mascota, cuidarla, enseñarle trucos y tratarlo como si fuera parte de la familia, hace que la persona disfrute aportar a ese proceso en el que lo ve crecer.
7. Auténticos
Cuando alguien habla con su mascota, suele tener la facilidad de expresar sus sentimientos y pensamientos sin pretensión o miedo a ser juzgados. Esto hace que la persona se enfoque en ser ella misma.
(I)
Te recomendamos estas noticias
- Nimbus, el perro sordo rescatado del maltrato en el sur de Quito por la Unidad de Bienestar Animal
- Mujer colgó a tres mascotas en árbol en presencia de un menor de edad
- ‘Ahora está mucho mejor redistribuido’, dice Eliana Molineros, exdirectora de Protección de Animales del Municipio de Guayaquil, sobre el centro de atención veterinaria municipal