La restricción de una fruta, muy apetecible, tiene sólidos argumentos para convencer a quienes están haciendo plan para bajar de peso del porqué no deben consumirla.
Esa fruta es el banano –banana, plátano- considerado como un superalimento.
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Son varios los nutricionistas que aconsejan incluir el plátano en la mesa, a la hora de querer perder kilos.
Aitor Sánchez, para La Vanguardia, señala que quienes piden sacar esta fruta cree que el plátano es una fruta muy calórica. “La confusión sobre su información ha llegado hasta tal punto que incluso hay personas que piensan que es una fruta muy grasa, cosa que es completamente falsa dado que ni siquiera tiene un 1% de grasa dentro de su composición”.
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¿Qué pasa si comes banana todos los días?
Desde Telemundo reseñan en un artículo: “Existe la creencia popular de que comer bananas engorda o dificulta la pérdida de peso, debido a que contienen demasiada azúcar. ¡Esto es falso!”.
La Dra. Shaziya Allarakha, en un artículo para el portal de información médica y de salud y citada en El Tiempo, destaca que no existen alimentos en específico que tengan el poder de adelgazar o subir de peso. Expertos de la Universidad de Pensilvania indica que la alimentación diaria y la actividad física son los componentes que sí podrían tener un impacto.
“La recomendación para una dieta equilibrada incluye de tres a cinco porciones de fruta todos los días, el banano sin duda se puede incorporar a una dieta saludable, incluso si el objetivo es perder peso”, escribe.
Por qué no comer plátano o banano si quiero perder kilos
Dejemos que sea un experto en nutrición el que exponga su punto de vista.
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En contravía a las opiniones mostradas, el doctor Enzo Fiorillo destaca que el banano o plátano tiene entre sus componentes la fructosa, que “es el azúcar típico de las frutas maduras, presente en casi todas y es su sabor dulce”.
Yo no recomiendo el banano si quieres perder grasa.
Enzo Fiorillo, doctor
Explica Fiorillo qué ocurre entonces al consumir banana o plátano, con ese componente, “no se procesa en el duodeno inicialmente sino que pasa de allí a unos segundos tramos del intestino delgado”.
Y lo segundo es que “no se puede metabolizar en el musculo esquelético”.
Eso significa que “va derechito” para al abdomen, a lo que se nos abulta al engordar, destaca Fiorillo, quien es nutricionista dietista, especialista en procesos de pérdida de grasa y ganancia muscular.
Mi consejo base, propone Fiorillo, es: “Gana la mayor masa muscular posible para procesar ese tipo de calorías”.
Y “a futuro lo calórico, que hoy te engorda, mañana no lo hará porque ahora tienes mayor gasto”. (I)