Con el paso de los años, nuestro cuerpo experimenta cambios naturales que pueden afectar nuestra flexibilidad y fuerza muscular. A partir de los 50, es común notar una disminución en la movilidad y un ligero debilitamiento de los músculos abdominales.
Sin embargo, no todo está perdido. El yoga, con sus suaves estiramientos y fortalecimiento muscular, ofrece una vía para revertir estos cambios y mejorar nuestra calidad de vida, a la vez que se reduce el estrés.
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Yoga para la flexibilidad y el fortalecimiento abdominal
El yoga es una disciplina milenaria que integra una gran variedad de posturas, cada una con sus objetivos específicos. Cuando se busca trabajar la flexibilidad y el abdomen al mismo tiempo, se recomienda practicar la postura del sabio Marichi, también conocida como Marichyasana.
Según Mujer Hoy, este asana tiene distintas variaciones, pero la básica se puede lograr siguiendo los siguientes pasos:
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- Siéntate sobre el suelo en la postura del bastón, con las piernas estiradas hacia el frente con la espalda recta y las manos apoyadas sobre el suelo junto a las caderas. Luego dobla la rodilla derecha y apoya tu pie sobre el suelo.
- Inhala, estira tu columna y después exhala lentamente a medida que giras hacia la derecha y llevas el brazo izquierdo alrededor de la parte exterior de la rodilla derecha. Para mantenerte estable, pon tu mano derecha detrás de ti y apóyala sobre el suelo.
- Mantén la columna alargada, sin curvaturas. Mujer Hoy indica que, si es posible, termina de girar tu torso y lleva la mano izquierda a tocar la derecha.
- Esta postura debe mantenerse por unos 5 o 6 minutos antes de volver a la posición inicial, relajando suavemente los músculos del abdomen. Recuerda repetir del otro lado.
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