Con un gran acuerdo por la seguridad que implica coordinación permanente entre Gobernación, Policía, alcaldías, fiscales, jueces y empresa privada (respetando la competencia de cada instancia) es posible combatir los niveles de violencia en el país que se reflejan con asesinatos en las calles a plena luz del día y con masacres dentro de los centros penitenciarios.