‘En diciembre todo el mundo va a tener bolsos grandes, porque viaja con regalos’: viajeros creen que el control aduanero debe ser más ágil y menos exhaustivo

Como cada fin de año, los aeropuertos de Guayaquil y Quito han visto un incremento significativo en el número de pasajeros, lo que ha conllevado una intensificación de los controles aduaneros.

Aunque estos controles buscan frenar la evasión fiscal y proteger la industria nacional, varios viajeros han manifestado su incomodidad debido a las largas filas y a lo que consideran revisiones “exhaustivas” e “innecesarias”.

Entre los pasajeros que esperaban pasar el control aduanero estaba Danilo Parra, cantante ecuatoriano que llegó desde Miami y que, aunque no tuvo inconvenientes, cuestionó la necesidad de los procedimientos en esta temporada.

“Yo vi el control normal, como siempre. Me preguntaron qué traigo y dije que eran efectos personales. Entiendo que es su trabajo, pero este proceso para mí es innecesario porque retrasa y hace las filas largas”, comentó.

Parra explicó que viajó con instrumentos musicales y equipos de sonido para su estudio, además de regalos para su equipo de trabajo. “Estoy dentro de lo permitido, no traigo nada que esté sujeto a tasación ni nada que perjudique al país”, recalcó.

El artista insistió en que en diciembre es lógico que los viajeros transporten más equipaje. “Todo el mundo va a tener bolsos grandes. Yo también traigo regalos para mis músicos y para mi equipo. Es Navidad, hay promociones, uno compra cosas y tiene que traerlas al país”, dijo.

Aunque no le cobraron impuestos ni le abrieron las maletas, señaló que igual debió reorganizar su equipaje tras el control. “Es normal, pero para mí innecesario, sobre todo en esta época, cuando la gente viene pensando en la familia y en los regalos”, añadió.

En las filas, otros pasajeros coincidieron con esa percepción. Andrea Cortés, ecuatoriana residente en Panamá, llegó al país para pasar las fiestas con su familia.

“La revisión fue rápida. Traje ropa y lociones. Solo pagué mi maleta porque mi boleto no la incluía”, relató. En su vuelo observó a varios viajeros con cuatro o cinco maletas.

“Vienen de Estados Unidos y es por Navidad. Muchos traen regalos para la familia”, sostuvo.

Jorge Carrión, procedente de Miami, dijo que no tuvo problemas al ingresar con dos maletas pequeñas, pero notó que el control se concentraba en quienes llevaban más equipaje.

“Hay bastante gente con bolsos gigantes. Me imagino que a ellos sí los están controlando más y algunos están en fila para pagar tributos”, señaló.

Otros viajeros calificaron el proceso como ágil siempre que no se transporten grandes volúmenes. Ángel, quien también llegó desde Estados Unidos, aseguró que no le cobraron impuestos.

“Trajimos ropa para uso personal y regalos para la familia. Si no tienes nada malo, no te abren las maletas”, afirmó.

Anthony Bravo, en cambio, contó que el trámite le tomó alrededor de media hora, aunque sin inconvenientes ni pagos adicionales.

La respuesta de Senae ante las denuncias

Mientras en el aeropuerto algunos pasajeros aceptan los controles como parte del viaje, en redes sociales se multiplicaron las quejas contra el Servicio Nacional de Aduana del Ecuador (Senae).

Usuarios en X calificaron de presuntos abusos en los cobros de impuestos, cuestionaron la exigencia de facturas a nombre del pasajero y alertaron que los valores se calculan con precios de referencia cuando no existen comprobantes.

También se reportaron filas de hasta una hora en el aeropuerto de Quito, en plena temporada alta.

Ante estos reclamos, Senae defendió los operativos y explicó que, por las festividades de Navidad y fin de año, se intensificaron los controles en los aeropuertos de Guayaquil y Quito para frenar la evasión de impuestos.

La entidad señaló que los equipajes son revisados uno a uno con el objetivo de detectar mercancía que exceda el uso personal o familiar y evidencie fines comerciales.

Aduana intensifica controles en aeropuertos: estos son algunos de los objetos que pueden ingresar al país sin pago de impuestos

La Aduana sostuvo que, en las últimas semanas, se ha identificado el ingreso de ropa, calzado, joyas y otros bienes en cantidades que superan lo permitido.

En uno de los casos difundidos en redes sociales, precisó que una pasajera ingresó 18 pantalones, 15 buzos, 12 pares de zapatos y un teléfono celular adicional, por lo que, conforme a la normativa, debía pagar tributos sobre el excedente.

Senae reiteró que estos controles buscan evitar una competencia desleal que afecta a la industria nacional, a los importadores formales y a las empresas de courier que operan legalmente.

Además, recordó que la normativa permite el ingreso de varios artículos como efectos personales sin pago de impuestos, siempre que no se superen los límites establecidos, y que los tributos se liquidan únicamente sobre los bienes que exceden lo autorizado.

En medio del debate, los pasajeros continúan llegando con maletas cargadas de regalos.

Para muchos, las revisiones forman parte del retorno al país; para otros, representan un primer obstáculo antes del reencuentro familiar. (I)