Por la pandemia de COVID-19, las iglesias guayaquileñas cerraron al público en marzo pasado durante varias semanas. En ese periodo, miles de personas fallecieron por el coronavirus, mal que se sigue propagando entre los porteños.

Aquellos feligreses que perdieron a sus seres queridos acudieron a los templos para orar por sus almas y pedir por la salud de sus familiares.

Dos de las iglesias patrimoniales que recibieron las visitas de los fieles para elevar sus plegarias son María Auxiliadora, ubicada en el sur, y Nuestra Señora del Carmen, también conocida como La Victoria, situada en el centro porteño.

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La Victoria

En el espacio donde actualmente se asienta el parque Victoria, entre avenida Quito, Clemente Ballén, Diez de Agosto y Pedro Moncayo, en 1860 se libró una batalla. Tropas peruanas intervinieron en la ciudad porteña, pues el general Guillermo Franco se había autoproclamado jefe supremo de Guayaquil, apoyado por Ramón Castilla, presidente de ese país vecino.

Los batallones de Gabriel García Moreno y Juan José Flores vencieron a las escuadras peruanas en este sitio. Por ello, popularmente, empezó a conocerse como La Victoria.

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Según reseñas municipales, el 1 de junio de 1888, el canónigo cuencano Nicanor Corral y Bandera solicitó al cabildo un espacio para la construcción de una capilla.

Tres años después, la edificación de madera estaba lista. No obstante, el templo sufrió varias reconstrucciones por los daños en su estructura.

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En el año 1934, el sacerdote Carlos María de la Torre impulsó la construcción de la iglesia en hormigón armado. El arquitecto italiano Paolo Russo estuvo a cargo del diseño de la nueva estructura.

Los feligreses, sobre todo del centro de Guayaquil, acuden a la iglesia La Victoria. Foto: Archivo.

El arquitecto Luigi Fratta encabezó su construcción, en la que también participó el artista italiano Emilio Soro Sguria.

Ese año el templo fue entregado a los sacerdotes Carmelitas Descalzos. De ahí que su nombre fue cambiado a Nuestra Señora del Carmen, pues antes era conocido como Purísimo Corazón de María.

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En 1941 se realizó el acto de bendición de este templo católico, que contaba con sus dos torres y la fachada principal.

En 1942, la estructura de la iglesia sufrió daños por el terremoto de 7,7 que sacudió gran parte del Ecuador. Fue restaurada años después.

En la parte superior de esta céntrica iglesia está establecido un ábside circular con figuras de san Mateo, san Lucas, san Marcos y san Juan. Su nave central evoca a las iglesias medievales europeas.

María Auxiliadora

Esta iglesia católica está ubicada en la avenida Domingo Comín, sur de la urbe porteña.

Su historia se remonta a 1911 con la creación del colegio Cristóbal Colón, que en esa época era un edificio de madera que tenía dos pisos. En la esquina se construyó la iglesia.

En 1919, el Municipio de Guayaquil aprobó la edificación de un nuevo templo. Dos años después se colocó la primera piedra y recién en 1928 se inauguró este espacio, regentado por los salesianos.

La iglesia María Auxiliadora, en el sur, fue construida entre 1921 y 1928. Foto: Archivo.

El arquitecto Paolo Russo también estuvo encargado del diseño de este templo, que décadas después fue elevado a santuario Mariano Arquidiocesano de María Auxiliadora.

Las arcadas góticas de su fachada principal es uno de sus atractivos. En el año 2013, se realizó una modificación en el altar mayor de esta iglesia para acoger una obra de arte.

El artista David Pacurucu elaboró una réplica del cuadro de María Auxiliadora que pintó el artista Tomás Lorenzone a pedido de san Juan Bosco, en 1865, para la Basílica de Turín, en Italia. (I)