De las quince mesas que tiene el chifa Dinastía Sur, en Chimborazo y El Oro, para atender a sus clientes, apenas dos estaban ocupadas por comensales, la tarde del pasado martes.
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El nerviosismo y temor que existe por el coronavirus, que surgió en Wuhan (China), han propiciado que la gente deje de acudir a estos locales que expenden platillos de la gastronomía asiática.
De las quince mesas que tiene el chifa Dinastía Sur, en Chimborazo y El Oro, para atender a sus clientes, apenas dos estaban ocupadas por comensales, la tarde del pasado martes.
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