Javier Arveláez caminaba por la manzana 402 de la ciudadela Martha de Roldós, cerca de las 17:00 del pasado martes. Se detuvo en la tienda Criscar para comprar una bebida.

Detrás del mostrador apareció Washington Zambrano, propietario del local, quien lo atendió. Él es uno de los primeros moradores de esa ciudadela del norte. Contó que en ese inmueble lleva viviendo dos años, pues antes habitó en la manzana 513, durante 35.

Este programa habitacional fue gestado por el gobierno de Jaime Roldós Aguilera (1979 1981), quien falleció en un accidente aéreo junto a su esposa Martha Bucaram de Roldós y una comitiva. Ayer se recordaron 38 años de este hecho.

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Fue en 1982 cuando se inició la entrega de las primeras casas por parte del Banco Ecuatoriano de la Vivienda. El plan iba a llamarse Unidad Popular Norte. Luego de la tragedia del mandatario y su esposa, fue bautizada como Martha Bucaram de Roldós.

“Yo recuerdo que Osvaldo Hurtado (quien reemplazó a Roldós en el cargo) en una ceremonia en el parque de la (manzana) 500 hizo la entrega simbólica a tres familias”, manifestó Zambrano.

Un busto en homenaje a la fallecida primera dama reposa en un pequeño parque en el interior de la ciudadela, que se muestra abierta y por la que a diario transitan miles que entran a sus callejones o van al cerro vecino.

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Zambrano dijo que ‘la Martha’, como se conoce popularmente a la ciudadela, está dividida en nueve sectores. “Estos van desde el 100 hasta el 900. El sector 1 comprende la manzana 100, el sector 2 la manzana 200, así sucesivamente”, indicó.

El movimiento comercial dinamiza al sector. Hay quienes dicen que en ‘la Martha’ se encuentra de todo, al paso. Al ingresar a la ciudadela, en la avenida 38, los vendedores informales copan las veredas. También hay decenas de locales ofertando desde pescado hasta juguetes.

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María de Lourdes Chele reside en el sector 7, en un pasaje peatonal, característica de la ciudadela del norte. En ese lugar ha vivido 37 años. “Aquí llegué con mis hijos y mi esposo el 26 de julio de 1982”, dijo.

En los exteriores del domicilio de Chele hay un anuncio de venta de helados. Desde allí, ha visto el crecimiento no solo de ‘la Martha’, sino de zonas aledañas. “El cerro (de Mapasingue) era full árboles, no había nada de casas cuando nos establecimos aquí. Después vinieron las invasiones”, narró.

Recordó que el acceso al sitio, durante los primeros años, era en pequeñas busetas. “Luego aparecieron la línea 53 y la 9 que fueron las primeras en llegar”, sostuvo.

La ciudadela limita con los sectores La Madrigal, Santa Adriana, Tanca Marengo y con el cerro de Mapasingue, lugar donde están apostadas cerca de ocho cooperativas.

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Además del busto, el nombre de Martha de Roldós también fue asignado a un centro de salud, construido hace 30 años, y a un colegio.

De este último, moradores aducen que fue edificado por gestión de padres de familia de la ciudadela.

Diariamente, decenas de mujeres que viven en la ciudadela o en zonas aledañas, acuden al centro de salud materno infantil. Junto a este establecimiento médico, desde hace ocho años opera una Unidad de Policía Comunitaria (UPC).

Zambrano explicó que en ese sitio antes funcionaba la Casa Comunal, lugar donde se reunían los moradores junto a los líderes barriales para tratar temas respecto a la ciudadela.

Desde el 2006, en la ciudadela funciona el Registro Civil Municipal, en un predio que antes era utilizado como reducto deportivo. Allí, las canchas eran de arcilla.

Un año después y en un edificio contiguo se inauguró la Corporación para la Seguridad Ciudadana de Guayaquil, entidad municipal encargada, entre otros asuntos, de monitorear las cámaras de seguridad instaladas en las calles de la urbe.

Zambrano y Chele coinciden en que, a pesar de que en la ciudadela conviven con varias problemáticas como la delincuencia o el consumo de drogas, sus moradores tienen sentido de pertenencia.

“Muchos vecinos se han ido, pero regresan a visitar a los amigos, incluso vienen a comprar a los pequeños mercados”, mencionó Chele.

Ellos aspiran a que la calidad de vida mejore en la zona. La apertura de un nuevo parque en los próximos meses les da esperanza de más obras. (I)

La ciudadela se inició con el regreso de la democracia en la presidencia de Jaime Roldós. En 1982, Osvaldo Hurtado vino a inaugurarla”.Washington Zambrano, morador de la ciudadela Martha de Roldós.