Una frazada tejida a mano y teñida con nogal (árbol) fue uno de los trabajos de la exposición De la flora a la tinta, que se realizó en el Parque Histórico Guayaquil y mostró algunas de las técnicas ancestrales de extracción de pigmentos naturales.

La muestra fue elaborada por estudiantes de la Espol, del último semestre de la materia Proyecto de Diseño III, de la Escuela de Diseño y Comunicación Visual.

El fin fue fomentar la riqueza natural como patrimonio cultural ecuatoriano, señaló Andrea Pino, docente que dirige el proyecto.

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La propuesta es parte del El observatorio visual, un programa de carácter interdisciplinario. Acudieron unas 500 personas.(F)