Las convicciones religiosas de los testigos de Jehová –una rama del cristianismo que profesan unos ocho millones de personas en el mundo, según su propia web– les impiden aceptar transfusiones de sangre durante un acto médico, destaca un artículo de diario El País de España, según el cual el hospital del Mar de Barcelona ha desplegado un protocolo para garantizar el trasplante renal sin transfusión de sangre a los testigos de Jehová.