EDGE, empresa de tecnología de defensa con sede en Emiratos Árabes Unidos, extendió su portafolio antidrones con el Allag-E, un interceptor eléctrico tierra-aire concebido para enfrentar la proliferación de Vehículos Aéreos No Tripulados (UAV) cada vez más rápidos y maniobrables. El sistema apunta a neutralizar amenazas aéreas con velocidad y precisión, replicando una lógica de caza aérea.
¿De qué va el inteceptor antidrones tierra-aire Allag-E?
El Allag-E es, en esencia, un dron interceptor compacto, con una envergadura de 700 mm y una longitud de 900 mm. Su concepto de ataque combina planeo y persecución activa, apoyado por una ojiva de disco cortante y ventiladores eléctricos entubados dobles, lo que permite “cazar” otros drones con la eficacia de un ave rapaz, reseña Interesting Engineering.
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Este sistema -presentado en el Salón Aeronáutico de Dubái 2025- fue hecho para responder a escenarios actuales en los que los drones de alta velocidad dominan el campo de batalla. Su perfil compacto y su enfoque en la rapidez hacen que sea una solución específica ante amenazas emergentes.
Su configuración de nueva generación, el Allag-E cuenta con un fuselaje cilíndrico de materiales compuestos, alas delta y winglets en las puntas. Los ventiladores eléctricos canalizados se ubican de manera simétrica sobre y bajo la cola, una disposición que EDGE considera que mejora la maniobrabilidad y el control durante la interceptación, detalla NextGenDefense.
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Con un peso máximo de despegue cercano a 8,5 kg, el interceptor está perfeccionado para operar a baja altitud. Puede superar los 250 km/h y alcanzar blancos a distancias de hasta 15 km, interceptando objetivos que vuelan a unos 200 km/h y a altitudes de hasta 3.000 metros, con un radio letal mayor a cinco metros y alta precisión.
Pensando para contrarrestar drones de reconocimiento de UAV de ataque, el Allag-E porta una ojiva de 1,7 kg con fragmentación tipo disco de corte y sensor de proximidad, capaz de destruir objetivos incluso en casi impactos. Su desarrollo refleja la evolución de la guerra moderna, donde los drones se han convertido en una amenaza dominante y han impulsado a las fuerzas armadas a priorizar la defensa aérea terrestre.
(I)
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