Las relaciones tóxicas no solo pueden afectarnos en múltiples niveles, también podrían hacernos envejecer más rápido. Así lo reveló un estudio publicado en la revista MedRxiv.
Los investigadores, liderados por Byungkyu Lee de la Universidad de Nueva York, midieron el envejecimiento de más de 2000 participantes usando marcas de metilación del ADN.
Las personas brindaron muestras de saliva que se sometieron a pruebas epigenéticas. Además, respondieron preguntas sobre sus relaciones para detectar si había algún “molestador”.
Publicidad
Los resultados no solo demostraron que más de la mitad de las personas aseguraba tener al menos a una persona tóxica entre sus seres allegados en su red.
También se vinculó a cada “molestador” con un 0,5 % de envejecimiento biológico más rápido; es decir, su edad biológica era 2,5 meses mayor que la cronológica en promedio.
La investigación también descubrió que la rapidez del envejecimiento en una persona es mayor cuando más de la mitad del círculo social está compuesta por seres tóxicos.
Publicidad
Aparte encontraron que la afectación más importante la causan las figuras ambivalentes, en otras palabras, aquellos que generan tanto apoyo como estrés en la vida de otro.
En contraste, los lazos afectivos negativos en su totalidad resultan menos perjudiciales porque es más claro y fácil para las personas tomar distancia y fijar límites con estos.
Publicidad
Las relaciones tóxicas también dañan la salud
Sin embargo, las relaciones tóxicas no solo podrían envejecernos más rápido, también afectan la salud aumentando el estrés crónico, lo cual a su vez genera mayor inflamación.
También desequilibra el sistema inmunitario y eleva de manera continua algunas hormonas que pueden afectar el estado físico y mental de una persona con el paso del tiempo.
Lee y su equipo de científicos hallaron grados de inflamación mayores y desequilibrio epigenético en aquellos que tenían demasiadas personas tóxicas en su círculo.
“Más allá del envejecimiento epigenético, la exposición a acoso se asocia con una peor autopercepción de la salud, mayores niveles de depresión y ansiedad, mayor inflamación, mayor multimorbilidad e indicadores antropométricos adversos”, señalan en el estudio.
Publicidad
“Estos hallazgos, en conjunto, resaltan el papel crucial de los vínculos sociales negativos en el envejecimiento biológico como estresores crónicos y la necesidad de intervenciones que reduzcan el impacto de los estresores sociales negativos arraigados en las redes sociales cercanas para promover trayectorias de envejecimiento más saludables”, agregan.
(I)
Te recomendamos estas noticias
- Adiós al verano, otoño, primavera e invierno: la Tierra parece estar desarrollando nuevas estaciones creadas por el hombre
- Adultos mayores y personas con discapacidad deberán viajar a las oficinas locales del Seguro Social de Estados Unidos a partir de agosto
- Esta enfermedad se conoce como la infección silenciosa y el 40 por ciento de las personas que la padecen no lo sabe: recomiendan hacerse la prueba