Un grupo de investigadores de la Universidad de Alicante, España, descubrieron que los niños superdotados no necesariamente son los primeros o los mejores de la clase, algo contrario a lo que algunos padres pueden creer.
Este estudio cognitivo, que se centra en el cerebro de las personas superdotadas, muestra que “muchos niños superdotados procesan la información más rápidamente y resuelven más partes de un problema a la vez que sus compañeros”, reseña Earth. Sin embargo, esto no quiere decir que tengan un rendimiento más alto que el de sus compañeros de clases.
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Los niños superinteligentes pueden utilizar la velocidad con la que resuelven ciertas cosas para dominar algún tema o materia, pero esto también puede causarles aburrimiento si perciben que las lecciones avanzan más lento.
Niños superdotados con dificultades en la escuela
De acuerdo con el estudio que cita Earth, que se publicó originalmente en Education Sciences, hay una brecha entre lo que un niño puede hacer mentalmente y sus habilidades en la vida cotidiana. Incluso, algunos de estos niños tienen dificultad para prestar mayor atención, tienen problemas para entregar sus tareas y suelen ser hiperactivos o inquietos.
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Aunque los maestros y los padres asuman que los estudiantes talentosos son organizados, educados y motivados, en el caso de los niños superdotados no necesariamente es así y no siempre tienen las mejores calificaciones. Esto se debe a un desarrollo asincrónico, es decir, “un crecimiento desigual en las habilidades de pensamiento, sociales y emocionales”.
Así que, para reconocer a un niño superdotado “la identificación debería basarse más en las capacidades cognitivas generales que en las puntuaciones de Coeficiente Intelectual (CI) o el rendimiento académico”.
(I)