A una nueva polémica le abre la puerta el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al pedir que investiguen a los funcionarios federales luego de hacerse eco de la compra de una mansión por parte del exmandatario Barack Obama.
“Insto al DOGE y al FBI a que investiguen a todos los empleados federales actuales y anteriores cuyo patrimonio neto parezca sospechosamente alto en relación con sus modestos salarios, independientemente de su afiliación a un partido político, empezando por Biden, Obama y Clinton. ¿Lo apruebas? A. Sí B. No”.
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Ese fue el mensaje difundido por Trump, el 23 de junio pasado, a través de redes sociales.
Las palabras las acompañó con una publicación que hace referencia a una propiedad de Obama, cuyo precio roza los 20 millones de dólares.
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Las “mansiones” de Obama
Varios medios dan cuenta de dos propiedades, al parecer, obtenidas por Obama, tras finalizar su periodo presidencial.
De acuerdo con el site Business Insider, Barack y Michelle Obama compraron una mansión por 11,75 millones de dólares en Martha’s Vineyard en Massachusetts. Al informarlo citan a Julia Wells, de Vineyard Gazette.
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Martha’s Vineyard “es un adinerado destino vacacional donde la familia Obama ha disfrutado algunas vacaciones de verano
Describen que la residencia de casi 7.000 pies cuadrados se encuentra en 29 acres (11,7 hectáreas) frente al mar con vista al Gran Estanque de Edgartown.
La casa tiene “siete dormitorios y 8 baños y medio”.
El interior está decorado en tonos neutros con acentos de madera natural.
La casa cuenta con múltiples terrazas y balcones para tomar el sol.
También hay una piscina al aire libre, así como un jacuzzi en un balcón del segundo piso.
Y aseguran que la propiedad cuenta con un cobertizo para botes y playa privada.
Sin embargo, en Yahoo Life Style informan que “los Obama no se alejaron mucho de la Casa Blanca cuando Barack dejó el cargo”.
Señalan que alquilaron una mansión de estilo Tudor en el barrio de Kalorama, en Washington, D.C., a pocos kilómetros del número 1600 de la Avenida Pensilvania. Compraron la casa en 2017 por 8,1 millones de dólares.
Según Curbed D.C., la casa es de 750 metros cuadrados, “con ocho dormitorios y nueve baños y medio”.
Y hasta hace un año, exactamente, de los Obama se aseguraba que aún eran “dueños de la casa de Chicago que compraron cuando Barack fue elegido por primera vez al Senado de los Estados Unidos en 2004”.
Indican que la casa es “georgiana de ladrillo rojo”. Suman el dato: Originalmente, la compraron por 1,65 millones de dólares. (I)