Para Krystal Kauffman, investigadora del Instituto de Investigación de Inteligencia Artificial Distribuida la escalada que emprendió Estados Unidos contra Venezuela está centrada en los minerales de este país, no es la lucha antinarcóticos.
La también becaria de Public Voices sobre tecnología en interés público en el OpEd Project, considera que si bien el presidente izquierdista Nicolás Maduro puede ser visto como “el villano perfecto”, no es menos cierto que Estados Unidos recopila un amplio historial de intervenciones en países por intereses económicos.
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“Quienes dudan de la centralidad de los minerales en la estrategia estadounidense deberían considerar el reciente acuerdo entre Washington y Kiev, que otorgó a las entidades estadounidenses acceso preferencial a las reservas minerales de Ucrania como compensación parcial por la asistencia en tiempos de guerra”, escribe Kauffman en un artículo de opinión en The Hill.
De hecho, la incautación por fuerzas militares estadounidenses de un tanquero con casi 2 millones de barriles de petróleo venezolano pone en relieve esta tesis. La irrupción divulgada el 10 de diciembre es considerada un “robo descarado” por parte de Venezuela.
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Estados Unidos utilizó militares desplegados en el Caribe desde agosto para esta operación.
El propio Donald Trump se ha referido a Maduro como el jefe de redes de tráfico de drogas. La justicia estadounidense elevó en agosto pasado a 50 millones de dólares la recompensa por información que conduzca a la captura del hijo político de Hugo Chávez.
Días más tarde, Estados Unidos inició el despliegue de buques de guerra y aviones de combate al Caribe con el argumento de combatir el narcotráfico. Al menos 21 embarcaciones con cerca de 90 muertos suman desde septiembre, sin que Estados Unidos hay mostrado droga incautada ni narcotraficantes arrestados.
“Son enemigos de la humanidad”, dice Trump
En septiembre, durante el octogésimo período de sesiones de la Asamblea de la ONU, Trump se refirió a la megabanda trasnacional Tren de Aragua, que su gobierno declaró organización terrorista junto al llamado Cartel de los Soles.
“Son enemigos de la humanidad, por esta razón hemos comenzado a utilizar el poderío militar de Estados Unidos para destruir estas redes de tráfico de Venezuela encabezadas por Nicolás Maduro”, indicó Trump entonces.
Trump afirmó durante su discurso en la ONU que se trata de terroristas que están enviando estos venenos a los Estados Unidos. “Sepan que los vamos a eliminar, no tenemos alternativa”, afirmó.
Según el líder republicano, en 2024 unos 300 mil estadounidenses murieron debido a las drogas. “Cada lancha que hundimos transporta droga suficiente para matar a 25 mil estadounidenses, no lo vamos a permitir”, recalcó.
Venezuela ha dicho en reiteradas oportunidades que el monumental despliegue militar de Estados Unidos enmascara busca realmente apoderarse del petróleo y los amplios recursos naturales del país caribeño.
Estados Unidos fabrica el conflicto, dice diplomático venezolano
“El conflicto no existe, lo fabrica Estados Unidos”, dijo en octubre pasado el representante de Venezuela ante Naciones Unidas, Samuel Moncada, durante una reunión extraordinaria solicitada por Caracas para tratar el despliegue militar de Estados Unidos en el Caribe y el bombardeo de embarcaciones.
“Si bien es cierto que en ese país existe una tragedia creada por la adicción a las drogas”, declaró entonces Moncada.
Pero, “existe otra peligrosa adicción de la que nadie habla, se trata de la adicción al petróleo, Estados Unidos está desesperado por controlar todas las fuentes de petróleo del mundo y cree que el petróleo de Venezuela les pertenece, su adicción desesperada lo lleva a violar toda norma del derecho internacional, así lo vimos en Irak, en Siria, en Libia, en Afganistán”, añadió el diplomático venezolano.
Son bien conocidos los problemas de Venezuela. El país ha vivido una crisis económica que ha pasado por varias etapas, incluso hiperinflación. Hay además, múltiples denuncias de corrupción a las que se suman señalamientos de fraude en las dos reelecciones de Maduro en 2028 y 2024.
Pero el despliegue militar de Estados Unidos a juicio de Kauffman, está lejos de tener la intención real de ayudar a los venezolanos a superar la crisis política, social y económica que viven.
“Estados Unidos tiene un historial de intervención en países ricos en recursos con pretextos que parecen nobles”, subraya Kauffman.
La investigadora cita ejemplos que van desde “los yacimientos petrolíferos de Irán hasta las minas de cobre de Chile, las tierras agrícolas de Guatemala, las reservas petroleras de Irak y Libia, y la riqueza mineral del Congo e Indonesia”.
En todos estos países, la “política estadounidense ha combinado una y otra vez intereses estratégicos con ambición económica”.
Todo esto, añade, se disfraza en una lucha contra el comunismo, el terrorismo o una crisis humanitaria.
“Dadas sus reservas petroleras y sus depósitos minerales cada vez más esenciales, Venezuela se enmarca claramente en este patrón histórico”. (I)