No es una obra teatral, es una performance, dice Luis Antonio Aguilar, creador y director de La Cyborg en la disco. Ayer fue el último día en que esta puesta en escena estuvo a disposición del público en el Teatro Sánchez Aguilar.

La propuesta nació de una reflexión de Aguilar del manifiesto de Donna Hathaway, Cyborg, y de la ontología Cyborg de Teresa Aguilar García.

“Transformar el organismo cibernético en un cuerpo de arte me parece, a mí, al menos, tanto divertido como interesante”, manifestó Aguilar. La puesta en escena fue sobre todo técnica y pretendía demostrar el concepto, es por eso que el sonido para la performance estuvo pensado para que fuera el mayor atractivo.

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Con una cuadrafonía hecha por Juan José Ripalda. La cuadrafonía consiste en que el sonido viaje en cuatro puntos, llegando a envolver todo el espacio en el que se está. Alejado de la rigidez del teatro, como lo dice el director, La Cyborg en la disco ofreció la oportunidad de vivir una experiencia distinta, donde la audiencia tuvo la oportunidad de bailar, simplemente disfrutar el momento y además llevarse una reflexión.

Aguilar sostuvo que la tesis de su creación fue que “el Cyborg tiene como lugar predilecto actualmente una fiesta electrónica”, explicó que es uno de los pocos géneros creados de los instrumentos de la generación del momento (sintetizadores). Fue por eso que animar a la audiencia a bailar fue una de las actividades más importantes para comparar el planteamiento inicial.

Proyecciones, locuciones, voz en off, también fueron parte de los elementos que potencializaron la performance que se presentó por última vez en el Teatro Sánchez Aguilar, o al menos por ahora. La idea de su creador fue poder convertir La Cyborg en la disco en una presentación que se vuelva parte de la representación de la ciudad a través de los años.

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José Andrés Caballero y Marla Garzón fueron quienes interpretaron las personalidades en La Cyborg, que no tenía diálogos, sino que se manejaba a manera de monólogos construidos a la par.

Luis Antonio Aguilar tiene una maestría en Performance en la Universidad Nacional de las Artes de Argentina. Ha participado como actor en obras locales como La era del sexo 3 en Pop-Up. En años anteriores participó en presentaciones como El Cascanueces. (E)