Hizo su debut en la pantalla chica el 27 de julio de 1940 logrando romper todos los esquemas conocidos. Su creador, el animador, dibujante y director estadounidense Fred Avery, famoso por producir dibujos animados durante la Era Dorada de Hollywood, pensó en un personaje cuyas características sean su astucia e irreverencia. "Lo vemos aparecer del fondo de su madriguera cuando un tipo le está apuntando con una escopeta en la cara. Esperas que el conejo salga corriendo o se eche a gritar, pero Bugs simplemente lanza ese comentario casual ('¿Qué hay de nuevo, viejo?'). Nos pareció tan divertido que dije que lo teníamos que repetir siempre que pudiésemos", recordaba su creador cuando se le preguntaba por Bugs Bunny, alcanzando más fama por haber sido nominado tres veces al premio Óscar (ganó uno), protagonizó una película con el basquebolista Michael Jordan y puso su cara de millones de productos en una de las franquicias más exitosas de la historia. ¿Pero, cuál fue su secreto?

"El conejo orejudo" como lo llamaba Elmer Gruñón, su eterno perseguidor, nació de forma abrupta y hasta participó de la Segunda Guerra Mundial. Todo comenzó a finales de la década del 30 en los estudios Leon Schlesinger Productions, rivales en la producción de cortos animados de Walt Disney. La empresa operaba en el complejo de Warner Bros ubicado en Hollywood y tenía una saga llamada Looney Tunes.

La estatuilla dorada convenció a Schlesinger de venderle a Warner Bros, otro ciclo de cortos animados, al que bautizó Merrie Melodies, que eran musicalizados para poder vender discos del amplio catálogo musical con el que contaba la empresa. El equipo de animación no era, pero a partir de este acuerdo, tuvieron más trabajo. Para 1938, Schlesinger y su equipo se vio sobrepasado de tareas con los estrenos de Looney Tunes y Merrie Melodies. El año anterior habían logrado mucho suceso Porky's Duck Hunt, en el que habían debutado nada menos que el cerdito Porky y el Pato Lucas. Sin ideas frescas, el realizador Bob Clampett recicló chistes que habían quedado de otras producciones y disfrazó al pato con un traje de conejo. El dibujante Ben 'Bugs' Hardaway fue el encargado de meter a Lucas en ese disfraz. Así, el corto Porky's Hare Hunt sirvió para pensar en crear un conejo como personaje central. La tarea fue encomendada a Frederick Bean 'Tex' Avery, animador que había hecho sus primeras experiencias con Oswald, el conejo que muchos consideran antepasado directo de Mickey Mouse.

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En 1940, Avery reinventa al pato disfrazado y le otorga otro estilo y personalidad. Así, deja de ser un lunático hiperactivo y se convierte en un personaje más reflexivo, inteligente y algo soberbio. "Decidimos que sería un conejo relajado, confiado... ¡Algo totalmente diferente a lo que uno esperaría de un animal así! Y cuando se nos ocurrió que frente al caño de una escopeta solo diría '¿Qué hay de nuevo, viejo?', todos se mataron de risa. La gente esperaba que el conejo gritara o se escapara y no que hiciera ese comentario tan casual. Fue tan efectivo que decidimos usar la frase cada vez que pudiera", recordó Avery.

La voz para el nuevo personaje requirió de mucho cuidado. La realizó Mel Blanc, reconocido como "el hombre de las mil voces", quien hacía la de varios personajes de Looney Tunes. "Entendí que ya no era un animal tonto sino uno muy astuto", reveló tiempo después Blanc. Esto lo llevó a pensar en un acento propio de Brooklyn, que por ese entonces era un sitio de Nueva York asociado con estafadores y delincuente. Se dice que Mel Blanc actuaba y pensaba como el personaje animado. En 1961 sufrió un accidente automovilístico por lo cual estuvo en coma durante dos semanas sin responder, hasta que un cirujano se le acercó y le preguntó '¡Bugs Bunny! ¿Cómo estás hoy?'. En ese momento sorprendentemente Mel respondió con un '¿Qué hay de nuevo, viejo?' y despertó del coma.

Una vez que tuvo una voz propia y a medida que avanzaban los cortos de Bugs Bunny su personalidad se iba estilizándose aún más y se volvió único. "Lo más difícil de este personaje fue cómo hacer que fuera gracioso pero sin ser agresivo o violento. Por eso en cada historia nos preocupamos porque quede claro que él solo responde cuando es atacado. Nosotros queríamos que Bugs Bunny fuera un buen tipo, no alguien que hacía bullying", explicó Chuck Jones, uno de los responsables del éxito Looney Tunes y de la evolución del conejo.

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Ese estilo inesperado pronto atrapó a la audiencia. El equipo empezó a probar más cosas alocadas y su popularidad se elevó tanto que en la Segunda Guerra Mundial el ejército de los Estados Unidos encargó una serie de cortos para enseñarle de manera atractiva y sencilla a sus soldados cómo comportarse con ciertos secretos e informaciones secretas.

En la década del 60 el conejo se despidió de los cortos para el cine y fue llevado a la televisión con The Bugs Bunny Show, con muchas de las producciones que habían sido creadas después de 1948 y en nuevas aventuras y personajes. Gracias a estas repeticiones y al poder de mercadeo, Bugs Bunny se volvió el personaje animado más famoso del mundo, un título que comparte con Mickey Mouse.

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En los 90, Bugs Bunny no tenía nuevas apariciones, más allá de esporádicas menciones en algunos dibujos animados de la época, en Warner Bros. llegaron a creer que se había convertido en una pieza de museo, pero fue el básquet que lo sacó del olvido. En 1992, la marca Nike hizo un acercamiento con los estudios para usar al conejo en una publicidad junto con Michael Jordan. "Fue muy difícil ponernos de acuerdo. Nos costó unirnos. Luchamos con Warner Bros. durante meses tratando de modernizar el personaje de Bugs para la publicidad. Finalmente aceptaron lo que queríamos hacer y fue tal éxito cuando se estrenó en el Super Bowl que les abrió los ojos y les dejó en claro que Bugs todavía tenía relevancia", recordó el director Joe Pytka.

El cineasta también dirigió Space Jam, una comedia insólita que mezclaba animados con gente real. "También fue una lucha porque nadie quería mezclar animación y acción en vivo. Robert Zemeckis les había dicho que hacer ¿Quién engañó a Roger Rabbit? fue lo más difícil de su vida y que jamás lo repetiría. Eso sin dudas los desanimó, pero lo logramos".

En su cumpleaños 80, Bugs Bunny sigue cautivando con nuevos personajes y disparatadas aventuras. Su catálogo de cortos llegó al streaming de los Estados Unidos de la mano de HBO Max y se volvió un éxito rotundo.

Y como para que siga viendo las hilarantes ocurrencias del conejo, el canal Boomerang pondrá los mejores episodios de Looney Tunes y New Looney Tunes; y Cartoon Network tendrá hasta hoy 27 de julio segmentos especiales dedicados al orejudo personaje que logró en 1985 ser el segundo personaje animado en tener su propia estrella en el salón de la fama de Hollywood (el primero fue Mickey Mouse). (E)

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