Una idea que surgió hace tres años se plasmará en la película Camino a la libertad, cuyo rodaje empezará el próximo 10 de febrero. El plan inicial era realizar una serie “sobre la historia de Guayaquil”, sin embargo, el proyecto se transformó en un filme, que retrocederá 200 años en la historia.

“Esta película es la historia de unos patriotas que forjan la independencia de Guayaquil y de Ecuador. El filme empieza con el 1 de octubre de 1820 en la llamada Fragua de Vulcano, donde se logran poner de acuerdo para empezar esta lucha independentista uniendo a ellos muchos elementos que logran que se convierta esto en una batalla más estratégica que en una batalla física...”, explica Veyki Valdez, directora de la cinta, cuya trama se extenderá hasta el 24 de mayo de 1820.

Pinturas y la historia misma sirvieron como base para ambientar los escenarios en donde se filmará. “Hemos tenido que reconstruir tanto los interiores como los exteriores de Guayaquil, basándonos en la historia y en las pocas pinturas que hay”, comenta Valdez, quien también escribió el guion con asesoramiento de Melvin Hoyos, director de Cultura de la Municipalidad.

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El guion fue analizado por el Laboratorio de la Universidad de La Rioja, en España. “Ha sido evaluado en España para ver si causa interés con los laboratorios de guiones, porque a nivel internacional posiblemente a mucha gente no le interese la independencia de Guayaquil o de Ecuador, pero sí puede engancharnos una historia de amor, un triángulo amoroso, fricciones entre dos amigos, traición, dolor, estos ingredientes que hace que tú vayas al cine”, señala Valdez.

Para relatar esta historia se apoyarán en el uso de la tecnología, además se asociaron con Sony Broadcasting de Miami. “Nos hemos fusionado para poder trabajar técnicamente con una tecnología 4K con sensores 6K”, afirma, y añade que emplearán la técnica audiovisual como el croma.

El rodaje está previsto que dure entre seis y siete semanas, mientras que la edición y posproducción de cuatro a cinco meses.

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En cuanto a las locaciones, en Durán construyeron los estudios de filmación sobre un área que supera los 1500 metros cuadrados. Aquí se elaboró la escenografía para cada escena de la época. Las batallas se rodarán en la Brigada de Caballería Blindada Galápagos, en Riobamba, con el apoyo de la fuerza militar y logística.

La búsqueda de los actores, según Valdez, comenzó hace dos años y ahora el elenco está compuesto por 12 actores principales, más de 30 actores secundarios y alrededor de 400 extras. En ese contexto, Emmanuel Palomares dará vida a León de Febres Cordero, Efraín Ruales (Gregorio Escobedo), Alejandra Paredes (Ana Garaycoa de Villamil), Juan Carlos Román (José de Villamil), Fabo Doja (José Joaquín de Olmedo), Verónica Pinzón (Isabelita Morlás), Danilo Rivadeneira (José de Antepara), entre otros.

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Según Román, José de Villamil es uno de los promotores de la revolución y todo se fraguará dentro de su casa. “Hay muchas cosas que la historia no sabe y nosotros tenemos que agregarle un poquito más de historia ficticia, pero obviamente basado en hechos reales tienes que ajustarte muchísimo a momentos que sucedieron...”, comenta, y acota que este rol se convierte en uno de los más importantes de su carrera.

“He investigado acerca de la vida de Ana..., es una de las precursoras, de las mentalizadoras en que se arme esta reunión tan importante donde iban a salir las decisiones para poder ya tomar la independencia. A pesar de la época en que se vivía, la mujer fue realmente importante...”, asegura Paredes.

Por su parte, Pinzón señala que Isabelita representará a la mujer guayaquileña. “Porque ella para su edad y su época era, como lo podrán ver, una persona cuestionadora... Se cuestionaba por qué a las mujeres no nos hacían partícipes de lo que los hombres hablaban... Ella en la historia es el amor de León de Febres Cordero, como efectivamente pasó en la vida real...”, dice Pinzón. (I)