El actor Steve Carell aborda la historia real de un hombre que se recupera de un ataque brutal en su último filme de Hollywood Welcome to Marwen, mientras usa el arte como forma de terapia.

El actor, de 56 años, de The Office y Foxcatcher interpreta al fotógrafo estadounidense Mark Hogancamp, quien fue atacado en 2000 fuera de un bar después de contarle a un grupo de hombres que le gustaba trasvestirse.

Publicidad

Perseguido por el ataque, Hogancamp se vuelca al arte, construyendo un pueblo belga en miniatura durante la Segunda Guerra Mundial en su jardín, donde usa muñecas para volver a representar escenas.

"Atravesó una situación muy traumática y quería convencerlo de que su historia significó mucho para mí y pienso que para todos los involucrados en hacer la película", dijo Carell. 

Publicidad

"La inspiración para mí es retratar a alguien como él que frente a una adversidad así mantuvo su humanidad", agregó.

Las muñecas, que cobran vida en la película, estuvieron inspiradas en personas que Hogancamp conoce. Éstas incluyen a una vecina, una amiga y una cuidadora, interpretadas por Leslie Mann, Janelle Monae y Gwendoline Christie.

"Todas las personas más cercanas en su mundo son mujeres (...) Se rodea de mujeres y eso le da fuerza", dijo Carell.

El actor, que describe a Hogie como "una versión, mucho, mucho mejor de mí". Tuvo que practicar caminar con tacones ya que a su personaje le gusta usar zapatos de mujer. "Es duro hacerlo lucir natural. No puedo comprender cómo alguien haría eso diariamente", dijo. 

Welcome to Marwen está dirigida por el ganador del Óscar, Robert Zemeckis, conocido por Volver al Futuro y Forrest Gump.

"Pensé '¿no sería magnífico poder entrar en su imaginación y ver la manera en la que él realmente da vida en su mente a estas muñecas'?", dijo Zemeckis.

"Construimos las muñecas y teníamos un armario para ellas (...) y luego las escaneamos (...) y cuando los actores actuaban sus movimientos, sus interpretaciones se trasladaban a la muñeca", agregó.

Welcome to Marwen es el último papel dramático de Carell, conocido por hacer reír al público en películas como Anchorman y The 40-Year-Old Virgin.

"Realmente se trata de los guiones que me han ofrecido y las cosas que fueron interesantes para mí (...) No fue una decisión consciente alejarme de la comedia. Estoy seguro que voy a volver a hacer eso en algún punto", dijo. (I)