Amenazas de boicot, tensiones entre deportistas, marcha atrás del Comité Paralímpico Internacional (CIP), que finalmente excluyó a los deportistas rusos y bielorrusos: la llama de los Juegos Paralímpicos de Invierno de Pekín se encendió este viernes, mientras aún siguen los rescoldos de la polémica de la víspera.