Desde niño, Marlon Chito Vera era muy peleón. En sus entrevistas cuenta que en el colegio eso le trajo uno que otro problema, pero que desde que conoció las artes marciales mixtas, el único objetivo de esos golpes fue convertirse en peleador profesional.


A sus padres no les agradó la idea de que Chito se dedicara a las artes marciales mixtas (MMA, siglas en inglés). En una entrevista con EL UNIVERSO, dijo: “(Ellos) pensaron que lo quería hacer para darle un mal uso. Pero hay que demostrarle a las personas que realmente lo quieres hacer y que lo haces con el corazón. Ya con el tiempo se fueron dando cuenta que mis aspiraciones sí eran de verdad”.

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¿Cómo lo logró? En sus palabras, trabajando. Entrenando fuerte y a diario. Le ha tomado más de una década lograr el gran nivel que tiene ahora, para estar en el top 5 del peso gallo de UFC, la promoción de artes marciales mixtas más importante del mundo. Esta es su evolución.

Vera debutó de manera profesional en las artes marciales mixtas en junio de 2011, en Santa Elena, para el evento Reality Fighting; mientras que su primera participación en UFC 180 fue en noviembre de 2014, en Ciudad de México.


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Chito y su familia

El manabita es conocido por ser un hombre familiar. Su esposa María Paulina lo acompaña en cada pelea, y junto a sus tres hijos, Ana Paula, “Nacho” y “Eli”, son sus más grandes fans.

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La pareja se conoció en el colegio Jefferson, en Guayaquil. Se casaron cuando su primera hija tenía un año.

Ella, Ana Paula, fue uno de los motivos por los cuales Chito se esforzó tanto por llegar entrar en UFC. Quería conseguir el dinero para operarla, pues sufre de síndrome de Moebius, condición que causa parálisis facial no progresiva. Finalmente lo consiguió.

La otra pasión de 'Chito' Vera. Foto: Facebook.

Hoy la familia Vera Escobar vive en Costa Mesa, California. María Paulina es el pilar de la familia y cuida de los niños y de ‘Chito’ mientras él entrena cada día para llegar a ser campeón de UFC.

Parte de su entrenamiento es correr, pero también disfruta haciendo surf y montando a caballo. Si no fuera peleador, sería surfista, cree.

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(D)