El neerlandés Fabio Jakobsen (Deceuninck-Quick Step), corredor que se recuperó milagrosamente de una gravísima caída sufrida en Polonia en 2020, volvió a alzar los brazos en el WorldTour con su victoria al esprint en la cuarta etapa de la Vuelta a España disputada entre El Burgo de Osma y Molina de Aragón, jornada de 163,9 kilómetros en la que mantuvo el liderato el estonio Rein Taaramäe.
Victoria especial y emotiva para Jakobsen (Gorinchem, 24 años). La caída sufrida en la segunda etapa del Tour de Polonia 2020 en pugna con su compatriota Dylan Groenewegem, le dejó en coma, con un solo diente y en serio peligro de muerte. Los médicos hablaron de “un milagro”.
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Salvó la vida. Un año y múltiples operaciones después, el neerlandés, que ya había ganado 2 etapas en el Tour de Wallonie (Bélgica), replicó en Molina de Aragón. Fue el más rápido al esprint por delante del francés Arnaud Demare (Groupama-FDJ) y del danés Magnus Cort (EF Education-Nippo).
Fue el tercer triunfo de etapa en La Vuelta para Jakobsen, ya que logró 2 en 2019, en El Puig y Madrid. Volvió a sonreír, eso sí, con dentadura nueva, pues el accidente solo le dejó un diente sano, además de 130 puntos de sutura en el rostro.
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Con algo de confusión y nervios se lanzó el esprint de la cuarta etapa. Demare arrancó de lejos, pero se pegó a su rueda Jakobsen, quien tenía al francés como referencia. El neerlandés tuvo fuerza y decisión, apretó los dientes y logró la victoria de su vida, la que cierra el ciclo después de un accidente que siempre le marcará la vida.
“Es uno de los momentos más bonitos de mi carrera. Ha sido un largo camino hasta regresar a correr, esta victoria es la más emocionante de mi carrera. Va dedicada a la gente que me ha apoyado en mi recuperación. No tengo palabras para agradecer todo el apoyo recibido”, dijo Jakobsen en meta. Palabras de un hombre que volvió a la vida. Pura emoción.
El triunfo le significó también a Jakobsen pasar a liderar la clasificación por puntos, como nuevo dueño del maillot verde, que lucirá este miércoles en la disputa de la quinta etapa, un recorrido de 184,4 kilómetros entre Tarancón y Albacete. (D)