La imagen de Samuel Eto’o, engrandecida como notable delantero del FC Barcelona, está manchada por una serie de problemas, algunos de ellos de orden judicial. En el 2022 admitió haber cometido fraude fiscal de su época como jugador del Barça y pactó una pena de 22 meses de prisión suspendida y una multa de 1,5 millones de euros.