El gobierno británico y la UEFA tienen una reunión este lunes que puede derivar en el cambio de sede de la final de la Champions League, según anuncia el New York TimesEl objetivo del ejecutivo que preside Boris Johnson es que el partido entre Chelsea y Manchester City que cerrará la temporada europea se dispute en Wembley y no en Estambul, como está previsto. El hecho de que sean dos conjuntos ingleses los finalistas y las restricciones sanitarias actuales en Turquía hacen posible pensar en un cambio de sede, pese a que quedan 20 días para la final.

En los últimos días, la UEFA hizo público que su objetivo es que todo vaya según lo previsto y el encuentro se juegue el 29 de mayo en el estadio olímpico Ataturk de la capital turca. Sin embargo, Turquía está entre los países a los que el gobierno británico recomienda no viajar después de que hace unos días se decretase el cierre total por el aumento en los casos de coronavirus. De disputarse finalmente en Estambul, los aficionados de Chelsea y City tendrían muchos problemas para poder viajar.

Se da la circunstancia de que Estambul ya tuvo que renunciar a la final de la temporada pasada por el coronavirus, lo que llevó el desenlace a una final a ocho que se jugó en Portugal. Esta vez la historia se puede repetir, con los inconvenientes que eso supondría en el acuerdo entre UEFA y la capital turca por llevar la final de la Champions allí. Otra opción que no se descarta es un terreno neutral que no sea ni Wembley ni Estambul. Oporto, en Portugal, ganaría enteros en ese caso. En las próximas 48 horas habrá una decisión al respecto. (D)