A Emiliano Martínez no se le escapa nada. El controversial Dibu agarró un bebé de juguete que tenía la imagen de Kylian Mbappé y las imágenes se han hecho virales en las redes sociales. Están corriendo como la pólvora en las cuentas de los programas deportivos... Los festejos de Argentina por haber ganado la Copa Mundial de la FIFA luego de 36 años de larga espera sigue trayendo cola.

“Cualquier cosa que le tiren al arquero de la Scaloneta, elegido el mejor de la Copa del Mundo, termina atesorado en sus manos. Como pasó en plenos festejos del título este martes, cuando el Dibu atrapó un bebé de juguete que le arrojaron desde la marea de hinchas y que tenía pegada un recorte de la cara de... ¡Kylian Mbappé!”, dice acerca del suceso el diario bonaerense Olé.

El programa El Chiringuito, de España, se ha hecho eco de las locuras de las alocadas celebraciones de los miles de argentinos que se han tomado las principales arterias de la capital.

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“El ‘Dibu’ ‘le hizo upa’ a Mbappé...”, publicó.

Algunos internautas celebraron jocosos la acción del portero del Aston Villa, mientras otros repudiaban el acto y hasta sostienen que se trata de una montaje.

“Cuando España ganó el Mundial en 2010 en las celebraciones no recuerdo faltas de respeto hacia Holanda. Pero eso tiene que ver con la educación. El portero argentino deja mucho que desear”, dice el tuit de Carlos Cortell.

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“¿Quién es ese? Ah sí campeón del mundo, algo que Mbappé ya era a los 19 años, tuve que ir a googlear dónde juega para saberlo y su carrera no va a trascender más que eso, porque es malo, muy malo, mientras el otro está destinado a comerse el planeta fútbol los próximos 10 años”, subrayó el usuario @Gutyfts.

Otro internauta trae a colación una imagen de los seleccionados españoles festejando ruidosamente el triunfo de la Roja frente a Alemania en la final de la Eurocopa 2008 en Viena, Austria (0-1, gol de Fernando Torres). Se observa a Iker Casillas, Sergio Ramos y otros futbolistas paseándose en la zona mixta mientras el germano Bastian Schweinsteiger brinda declaraciones a periodistas.

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“Esta imagen es muy fea, terrible. Algunos no saben perder... algunos no saben ganar”, recuerda el usuario @fedeze7a.

La imagen de ‘Dibu’ Martínez bromeando con el bebé de juguete con rostro de Mbappé se viralizó en las redes sociales con la misma velocidad con la que el pueblo argentino copó las calles y autopistas para darle la bienvenida al plantel campeón del mundo. Olé calificó la acción del arquero como “chicanas futboleras”.

“...Ahora en suelo argentino dejó atrás las formalidades y se sumó a las chicanas futboleras. Y por eso se lo vio sostener a ese bebé de juguete mientras sonreía y le hacía upa...”.

Festejos polémicos en Qatar

La buena imagen que el meta había construido durante el partido contra Francia se vio empañada por el polémico gesto que hizo a la afición del estadio de Lusail al recibir el Guante de Oro, que lo acreditaba como mejor guardameta del Mundial 2022.

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Protagonizó incluso dos escenas comentadas después de la final.

La primera, al realizar un gesto obsceno con el trofeo de mejor arquero del Mundial, colocándolo a la altura de su entrepierna, en el podio con las autoridades presentes. Después, en un festejo en el que jugadores argentinos coreaban “Un minuto de silencio...”, antes de interrumpir el cántico y que el arquero terminara con “... por Mbappé”.

Aunque pocos entendieron por qué se le pasó por la cabeza el obsceno gesto, el propio jugador explicó tras la celebración en el campo el porqué de su celebración: “Lo hice porque los franceses me abucheaban. La soberbia conmigo no va”, dijo.

Pero más allá de las reacciones controvertidas y provocadoras, ¿en qué pensaba además Martínez tras proclamarse campeón del mundo? Según él mismo admitió, en los numerosos sacrificios realizados hasta llegar a lo más alto.

“Salgo de un lugar muy humilde, me fui de joven, muy chico, a Inglaterra”, señaló después del partido.

‘Dibu’ Martínez fue designado el mejor arquero del torneo, en el que sus paradas fueron decisivas para hacer campeona a Argentina.

Su aportación, especialmente en la tanda de penales, convirtió de nuevo a Martínez (30 años) en protagonista en un partido que fue una auténtica montaña rusa emocional.

En los tres goles que recibió durante la final no pudo hacer gran cosa: dos fueron penales tirados perfectamente por Mbappé (80 y 118) y otro un potente disparo del atacante francés (81).

(D)