Atlético Mineiro es finalista de la Copa Sudamericana 2025 y, de esta forma, Jorge Sampaoli tendrá la oportunidad de ganar por segunda vez esta competencia tras coronarse con Universidad de Chile en 2011.
El Galo derrotó esta semana a Independiente del Valle, en un triunfo inobjetable y en el que por primera vez desde que el casildense volvió al club se pudo plasmar su sello en la cancha.
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El equipo jugó bien y eliminó a uno de los candidatos a ganar el torneo, en una presentación que no es casualidad, pues Sampaoli ha hecho de la localía un plus y, además, apuntó a recuperar individualidades para potenciar el colectivo.
En cuanto al primer punto, el técnico ha conseguido un Atlético-MG fuerte cuando juega en casa: en este segundo ciclo al mando del equipo ha jugado como local en ocho oportunidades, con cinco victorias, tres empates y cero derrotas. Los números son más expresivos si se consideran los dos pasos del entrenador por el club, con 25 partidos dirigidos en su cancha con 18 triunfos, 7 empates y 0 caídas.
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En cuanto a los rendimientos individuales, el ex-DT de la Roja empezó a darles mayor rodaje a defensas como Iván Román, Victor Hugo y Ruan Tressoldi; recuperó a Guilherme Arana, que alguna vez fue seleccionado brasileño, pero que en el último tiempo exhibía un magro desempeño; les dio más protagonismo a jugadores como Fausto Vera, Rony, Bernard y Dudu (estos dos últimos, claves en la última clasificación); y le otorgó un nuevo rol a Hulk, no desgastándolo desde el primer minuto y permitiendo que sea importante en las fases finales de los partidos.
De esta forma, Atlético buscará repetir lo logrado en la última semana antes del gran desafío que le queda este año: la final de la Sudamericana 2025 en Asunción contra Lanús. Antes de enfrentar a los granates, tendrá diferentes pruebas en el Brasileirao: Internacional en Porto Alegre, Bahia en Belo Horizonte, Sport en Recife y Palmeiras en la capital mineira. (D)