Guillermo Duró ha podido darle un correcto funcionamiento a Emelec (9°) con pocas sesiones de entrenamiento luego de haber agarrado el cargo.
Estéticamente, quizás no es de lo mejor del torneo, pero se respalda bajo una premisa que siempre se defendió desde la opinión de este cronista: Emelec debía jugar mejor con la plantilla que tiene. En el fútbol todo puede pasar, pero en la planificación inicial, los azules contaban con un nivel para poder pelear los seis primeros lugares.
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Actualmente Emelec pelea un cupo al hexagonal de campeonato cuando hace dos meses estaba entre los últimos lugares, junto a los que van a jugar el cuadrangular por no descender. Es allí hacia donde siempre debió apuntar; era injustificable un equipo en puestos de descenso.
Desde el primer partido, la idea del entrenador comenzó a notarse, al igual que ocurrió en la vereda de en frente, la de Barcelona Sporting Club (3°), que no solo ganó 2-0 a Orense SC, sino que también demostró una expresión futbolística de dominio, de posesión y de una correcta sincronización de las piezas.
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Situaciones en el campo que se vieron en partidos pasados bajo el mando de Ismael Rescalvo, pero que el resultado adverso no permitía ponderar. Barcelona SC sigue siendo un equipo en crecimiento que busca primero recuperar niveles individuales que puedan potenciar el colectivo, lo cierto es que está aparentemente en el camino correcto para ser un serio candidato al título.
No obstante, arriba están los dos equipos más regulares de los últimos tres años: Independiente del Valle (1°) y Liga de Quito (2°). Ambos ganaron de forma ajustada y eso habla de la madurez y experiencia que tienen estos elencos para sacar adelante partidos en los que lucen incómodos, que vienen de procesos largos, con pocos cambios en el camino. (O)