En enero de 2016, un niño afgano de cinco años se volvió mundialmente famoso al aparecer en las redes sociales con una camiseta, hecha a partir de una funda de plástico, que llevaba el nombre de Lionel Messi escrito con un marcador. Su hermano subió la foto del pequeño con la improvisada prenda a su Facebook e inmediatamente se viralizó.