A Víctor Mendoza, arquero suplente surgido de la filial Toreros, se lo puede considerar el futbolista nacido en las divisiones menores amarillas con mayor protagonismo en el Barcelona campeón 2020: jugó dos veces. Esta es una realidad diametralmente opuesta a la de la década de mayor dominio canario en el torneo nacional, la de los 80. Los títulos de 1980, 1981, 1985, 1987, 1989 tuvieron entre sus figuras a jugadores trabajados en las canteras barcelonistas. Incluso, en esas cuatro primeras coronaciones aún estaba vigente Juan Madruñero, salido de las entrañas del club en 1970.

Para ser tricampeón 2013, 2014, 2105 y con el galardón del 2017 sumar cuatro títulos en cinco temporadas, Emelec tuvo el concurso clave de una base nacional que contaba con varios elementos subidos de las categorías formativas azules, como Enner Valencia, Marcos Caicedo, Ángel Mena, Fernando Gaibor y Robert Burbano, entre los principales.

Sé que este año Rescalvo hará énfasis en las formativas. Richard Borja

Para la campaña 2021 los dos cuadros del Astillero tienen escasos elementos de sus divisiones menores. La mayoría de los fichajes llegaron de otros equipos y entre ambos hay 17 jugadores oriundos de otros países (entre nacionalizados y los que ocupan plazas de extranjeros hay diez en Barcelona y siete en Emelec).

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“Por reglamento la FEF debería exigir a los clubes que trabajen más en las formativas, que promuevan a jóvenes como hace unos años, cuando se jugaba con un juvenil en cancha por determinado tiempo. A los equipos de primera división la FEF debe exigirles tener centros de alto rendimiento y que no solo se enfoquen en el deporte, sino también en lo psicológico, nutricional y educativo. Sería un extraordinario aporte. Ese trabajo podría ayudar a los elementos que salen al extranjero y no se consolidan; retornan porque no se adaptaron”, dice el exvolante Richard Borja, bicampeón con Emelec en el 2001 y 2002.

Agrega que “el modelo de trabajo de Independiente del Valle es muy bueno. Se fueron todos los que clasificaron a final de la Copa Libertadores 2016 y luego llegó otra promoción que fue la base para ganar la Sudamericana 2019. Hay un trabajo y planificación a corto y largo plazo que está dando buenos resultados”.

El trabajo en menores toma tiempo hasta que da frutos. Daniel Viteri

La ausencia de futbolistas salidos de las menores en Barcelona, para Flavio Perlaza, “es parte del problema de los equipos grandes. Deben contratar jugadores que no son de sus canteras por las exigencias que tienen. Por eso es que hay este abandono. Se debe poner énfasis en un trabajo de formativas a corto plazo para que puedan promover jugadores que deslumbren”.

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El exgolero Daniel Viteri, que como Borja desde las formativas millonarias escaló al primer equipo para ser bicampeón 2001-2002, opina que se ve poco hacia abajo por “tratar de sacar resultados inmediatos. Esto lo obliga a reforzarse con futbolistas de renombre o que hayan despuntado en los últimos tiempos. Para que un proyecto de formativas dé frutos se necesita un tiempo prudencial, pero por los resultados que desean alcanzar las directivas hacen estos fichajes”.

Borja destaca que Emelec haya absorbido a Rocafuerte FC, pero cree que “se debió dar prioridad a estas formativas, hacer un estudio para fortalecerlas. Tener buenos profesionales y observadores designados por el técnico para que vayan a ver los jugadores que realmente muestren un nivel muy superior al resto”. (D)

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Hólger Quiñónez (i) y Carlos Morales, de las menores de Barcelona a campeones.

Flavio Perlaza, opina

“Esto (pocas oportunidades para los jugadores de las menores) siempre ha ocurrido en nuestro fútbol; pero ahora con las leyes, que permiten (nacionalizaciones rápidas), más. Se deben fijar los objetivos porque si las propuestas del club no están claras las fusiones de nada sirven. Carlos Alfaro Moreno siempre estuvo ligado a Barcelona desde que conformó su academia. Tenía convenios antes de ser presidente, pero si los elementos (salidos de ahí) no han tenido oportunidad es mejor que los presten a otros equipos para que se terminen de formar”.

Richard Borja, aconseja

“Hay que motivar a los chicos (de las formativas) con trabajo psicológico de los entrenadores y de un profesional de esa rama. Hay que inculcarles que delante de él no solo está el extranjero, también los nacionales. El jugador de las menores debe ser ambicioso, exigente consigo mismo, trabajar más en las prácticas y fuera de ellas. Así se forma en lo deportivo y mental. La presión en el primer equipo de Emelec y Barcelona es fuerte y sin buena orientación los que suben, en muchos casos, son fulminados. Un trabajo estructurado puede dar frutos”.

Lo que dice Daniel Viteri

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“Los nacionalizados se han ganado su espacio en nuestro fútbol con esfuerzo. Cumpliendo las leyes han obtenido sus cartas de naturalización. Cuando los juveniles son buenos, por juego y carácter, se ganan su lugar en primera división. Si demuestran todo eso, seducen a un técnico para que los promueva al primer equipo”.