Una temporada duró la incursión de América en la serie A, divisional a la que regresó luego de pelear 30 años entre serie B y segunda categoría. Falta de experiencia en la plantilla y escasez de buenos resultados, que provocaron inestabilidad en el banquillo, fueron factores determinantes para que los cebollitas pierdan la categoría.

El rendimiento en números es bajo, con 5 triunfos en 29 fechas, 2 en mesa por no presentación de Deportivo Cuenca y Fuerza Amarilla.  

Con tres técnicos distintos, los americanistas perdieron 17 partidos y sumaron 7 empates. Francisco Correa arrancó en el banquillo, en la continuación de un proceso que llevó al equipo desde la segunda división, pero sin resultados, el plazo fue de trece jornadas.

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Igual número de juegos duró en el puesto Luis Espinel, su salida fue por discrepancias con Onofre Mejía tras caer con Emelec (1-2). Espinel habló de “penales infantiles” los cometidos por “un jugador experimentado”. El volante denunció al DT por tratarlo de “vendido”. Los dos dejaron el equipo.

Las últimas tres fechas dirigió Darwin Veloz, quien apuntaló la ilusión de la permanencia, pero cayó con Delfín 1-2 y selló el descenso.

“El balance es el descenso y eso nos deja para pensar que tal vez hicimos mal las cosas al inicio o al final del año, pero hubo un objetivo que fue consolidar jugadores jóvenes y así se hizo”, apuntó Veloz.

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1800 dólares como valor promedio, fue el rubro que manejó América para sueldos de sus jugadores al inicio de esta temporada, según indicó el presidente del club, Gino Guerrón, a EL UNIVERSO. (D)