Fuerza Amarilla, el club cuyos futbolistas tuvieron que vender entradas en las boleterías y en los exteriores del estadio de Machala en el último partido del 2017 para cobrar sus salarios, que a finales del 2018 enfrentó denuncias de falsificación de firmas en los roles de pago y que mantuvo en vilo su acceso a la LigaPro (como invitado), continúa con problemas económicos en el 2019.