La Gran Maestra se adueñó por cuarta vez consecutiva del campeonato de la Liga Italiana, serie A1, con su club Chieti. Entre caballos, alfiles, peones y torres la ecuatoriana es la reina del deporte ciencia y en el tablero impone su férrea autoridad. Ella es figura internacional.

A su   interminable colección de títulos provinciales, nacionales, sudamericanos y mundiales la ajedrecista ecuatoriana Martha Fierro (35 años) agregó otro al coronarse tetracampeona en Italia, con el club Chieti.

Pero sus éxitos en Italia se extendieron hasta ayer, al ubicarse en la casilla número doce del torneo  Open Internacional, de Ortisei, lo que la mantuvo dentro del top 100 de las mejores ajedrecistas del planeta.

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En una disciplina en la que  debió buscar apoyo de empresas privadas en sus inicios, Fierro le ha dado jaque mate a la adversidad. Su mejor jugada, hasta ahora, es la obtención del título de  Gran Maestra Internacional (GMI), grado que le permite competir en certámenes de damas y varones.

La sapiencia que exhibe en el tablero fue valorada en el país europeo: hasta el 2012 fue   entrenadora del equipo olímpico juvenil de Italia, cargo que desempeñó por tres temporadas.

Fierro confiesa que en el tablero se identifica con la dama porque con ella, habitualmente, da el golpe final.
La ajedrecista recuerda que las primeras nociones del deporte en que ahora es reina las recibió de Miguel Fierro Samaniego, su padre. Añora su participación en el torneo de Novatos de este Diario, en 1991. Y entre sus mejores triunfos uno en el  Grand Prix 2012 ante Maia Chiburdanidze, de Georgia, varias veces monarca mundial.