Si bien se reconoce la pertinencia de los temas y de las preguntas, los cambios y modificaciones planteados por la consulta no son claros y contundentes.
Brasil es un país acostumbrado a negociar entre pocas élites sus cambios sistémicos e institucionales más substantivos.
Es necesario aplicar la ley y evitar la impunidad para pacificar finalmente el país.
De acuerdo a los expertos en el área jurídica, se cometieron cinco ilegalidades con la aprehensión de Luis Fernando Camacho.
Queda claro que conviene relativizar el efecto placebo de un Mundial, que seguramente solo resulta destacable para el ganador.
En estas arenas movedizas, la pregunta es cuánto puede durar el nuevo gobierno.
América Latina, que durante más de dos décadas se benefició de la bonanza china, podría ver entonces frustradas las expectativas puestas en el gigante asiático.
Un reinicio fallido de la Unasur podría combinar la tragedia con la farsa.
La polarización resulta así un trampantojo. Una palabra más que se introduce en la jerga de la política que confunde, pero que es el producto de una estrategia.
La política brasileña tiene presidente, pero no líder de la oposición.
No es casual que el gran drama de nuestro tiempo sea la falta de sentido de la vida y el resurgir de manifestaciones fundamentalistas e identitarias.
Cabe preguntarse, ¿qué pasará con las demandas y la representación indígena? Muchas de estas eran parte del texto plebiscitado.
La participación ciudadana y el fortalecimiento de la democracia no pueden ser pasados por alto según los intereses de las mayorías transitorias.
Queda por esperar el pronunciamiento de la Corte Constitucional sobre el camino adecuado para procesar las preguntas.
El referendo del 25 de septiembre fue al mismo tiempo la elección con menor participación y con los resultados más disputados desde la llegada de los Castro.
La desconexión entre los ideales y los resultados del plebiscito es una de las grandes lecciones del fracaso del proyecto constituyente.
De manera inexplicable en los circuitos diplomáticos y académicos se sigue repitiendo que existe un pleno consenso democrático latinoamericano.
El proceso no ha terminado. Este recién se iniciará en una segunda etapa que, esperamos, pueda sacar las lecciones del proceso que ha concluido.
Un estudio reciente que se hizo en la región reveló que el aumento de las temperaturas incrementará el riesgo de muertes relacionadas con el calor.
El mensaje recibido por la comunidad política internacional, inversores y ciudadanos tiene nefastas consecuencias en los tres ámbitos.
En el contexto latinoamericano hay pocos debates públicos sobre el rol de los medios rusos, aunque tal vez la guerra en Ucrania modifique algo tal situación.
La creciente amenaza de las enfermedades infecciosas emergentes
La vida política, tal como la vida familiar, no es fácil. El conflicto entre diferentes perspectivas a menudo es agudo.
Existe una gran preocupación por entender cómo fue que un proceso con inédita participación ciudadana perdió tanto apoyo de la población.
La ausencia de un liderazgo opositor claro será un factor de desorientación que es común en los regímenes presidencialistas.
Colombia es un país con mucha influencia en la región. A partir de agosto presenciaremos cuán eficaz puede llegar a ser este giro.
Si la paz y la democracia no representan un proyecto colectivo en su diseño y ejecución, está destinado a fracasar.
Más allá de lo democrático con que se haya conformado la Convención Constitucional, parece que no hubo un diagnóstico profundo de lo que expresó la ciudadanía.
El pasado fin de semana se realizaron las elecciones presidenciales. Petro y Hernández pasaron al balotaje.
La diferencia en las capacidades de hombres y mujeres para adaptarse sigue generando preocupación.