QUITO
.- En los primeros cinco días de funcionamiento, el aeropuerto Mariscal Sucre, que opera en Tababela, registró más de 800 operaciones aéreas, entre vuelos nacionales, internacionales y aeropoliciales.
Al realizar una evaluación sobre la operación del Mariscal Sucre, el director de la Dirección de Aviación Civil (DAC), Fernando Guerrero; Freddy Égüez, de Servicios Aeroportuarios; así como el presidente de la Corporación Quiport, Philippe Baril, destacaron que el funcionamiento del nuevo aeropuerto superó sus expectativas.
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Uno de los problemas que aún debe sortear el usuario es la movilidad. Pese a que se ha desplegado un amplio operativo con policías de tránsito, el tramo que presenta mayores dificultades se encuentra en el puente sobre el río Chiche.
Son dos kilómetros donde se presentan las dificultades, pues a un kilómetro de llegar al puente, la vía se reduce a un carril por lado y el lugar se convierte en un cuello de botella que se agrava en horas pico de la mañana, de 07:00 a 08:30; al mediodía, de 13:30 a 14:30; y en la tarde, a partir de las 17:00, según comentan los cinco policías que ayudan a mejorar la circulación vehicular.
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Se espera superar esta dificultad de movilidad con la construcción de un nuevo puente sobre el mismo río, que tendrá una dimensión de 226 metros y que tendrá seis carriles. Se proyecta terminar esta obra en agosto del próximo año.
El representante de Quiport, Philippe Baril, reveló que desde el 20 hasta el 24 de febrero se registraron 851 movimientos de aeronaves, de los cuales 439 fueron llegadas y 412 salidas. De este registro de vuelos se determina que 487 fueron internos, 357 internacionales y 7 usados entre aeropolicial y FAE.
Durante la primera semana, según Quiport, todos los servicios del aeropuerto Mariscal Sucre funcionaron con normalidad y fluidez. Agregó que la dificultad que se presentó en la atención de pasajeros fue que muchos viajeros llegaron con anticipación de horas, porque no tenían una regulación clara de los tiempos y distancias.
Las autoridades encargadas de la operación del nuevo aeropuerto de Quito señalaron que los filtros de migración funcionaron óptimamente y que las salas de embarque fueron suficientes para soportar la llegada de los viajeros que prefirieron estar con mucha anticipación.
Una de las preocupaciones de los usuarios son los altos costos de los alimentos, por lo que ayer se reveló que un viajero puede encontrar menús desde $ 2,99 y que en pocos meses más habrá un patio de comidas con variedad de precios.