El movimiento oficialista Alianza PAIS (AP) alcanzaría dos terceras partes de la nueva Asamblea Nacional, según el conteo rápido divulgado ayer por Participación Ciudadana, que le atribuye 91 de los 137 puestos disputados el domingo en las urnas. Esta cifra puede ser mayor, pues en ese estudio no se incluyó a los asambleístas en el exterior que suman seis escaños más.

Ese conteo determina que la segunda fuerza legislativa sería el movimiento CREO con 10 asambleístas, más 1 en alianza con el Partido Social Cristiano (PSC). Con ese representante, los socialcristianos contarán con 8 asambleístas y serían la tercera fuerza. Aunque la lista 6 asegura, según cálculos de sus dirigentes, que llegará a los 11 escaños.

Participación Ciudadana analizó las actas de 9.500 mesas (el 23% del total) y tomó en cuenta los métodos Webster para los nacionales y D’Hont para provinciales; también consideró los votos individuales.

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El presidente del Centro de Observación Ciudadana, Xavier Buendía, señala que sin contar con los votos aliados, por ejemplo los cinco escaños que alcanzaría Avanza, sino solo con los propios, AP ya tendría los 91 suficientes para realizar reformas constitucionales; por ejemplo, refiere, una que facilite una próxima reelección presidencial; o para retirar la inmunidad parlamentaria a asambleístas opositores.

Así AP tendría el control absoluto de la Asamblea en un hecho similar al de la Constituyente de Montecristi, en la que tuvo una significativa mayoría. Esta ocasión hubo un factor: la aplicación del método de D’Hondt para los provinciales, que consiste en la suma total de los votos totales alcanzados por una de las listas, tanto votos en plancha como unipersonales, que luego se dividen por la serie de los números 1, 2, 3, 4... de acuerdo con el número de asambleístas y se asignan curules a los más altos resultados.

En ese marco, por ejemplo, de acuerdo con el conteo de PC, en Azuay, AP obtuvo un apoyo global de casi 58% de la votación. No obstante se llevaría el 100% de la representación al obtener posiblemente cinco escaños.

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Otro caso es el distrito sur de Manabí, con el 57% obtendría el 100% de las cinco puestos.

Para el legislador que sería reelecto Virgilio Hernández (AP), este método, usado en la mayoría de países de América Latina, busca respetar una representación proporcional y abrir la posibilidad de conformación de mayorías. “No es eso lo que nos favorece. No solo se trata de ver cuánta votación tiene AP, sino cuántas tiene el resto de organizaciones. Si tenemos el 60% y los otras juntas no llegan al 20% es obvio que esos serán los resultados”.

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El presidente de la Asamblea, Fernando Cordero (AP), quien mantendría su curul, dijo que no esperaban tener tanto respaldo en la conformación de la legislatura, y que actuarán sin abusar del poder y que respetarán a las minorías.

Gilmar Gutiérrez, de Sociedad Patriótica, asegura que el método fue determinante para los resultados, pues con el de Webster, el oficialismo tendría unos 60. Para él, la dispersión de los sectores críticos al régimen fue clave para que ahora sean minoría en la Asamblea.

Luis Morales, del Prian, que de acuerdo con PC no tendría ningún legislador, advierte que este escenario se produjo, entre otras cosas, por la presunta persecución del régimen a Álvaro Noboa y la destrucción a los partidos con el escándalo de las firmas falsificadas. Y que muchas agrupaciones no entendieron los efectos de D’Hondt, y pensaron que con la plancha podrían enfrentarse a AP.

El asambleísta que sería reelegido Leonardo Viteri (CREO-Machete) precisó que los resultados de las elecciones son la consecuencia de todo un andamiaje organizado por el oficialismo, desde la postergación de las elecciones hasta el cambio al método de D’hondt.

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No obstante, al igual que sus colegas legisladores, admite que posiciones “egoístas, ambiciosas y chimbadoras” en los grupos de oposición alimentaron estos resultados.

Llamado por Ley de Medios

El presidente de la Asamblea, Fernando Cordero, señaló que siempre tuvo la hipótesis de que si AP tiene mayoría algunas leyes se podrían tramitar en el actual periodo. Dijo que dialogarán con las otras bancadas para analizar si la próxima semana se convoca a la aprobación de la Ley de Comunicación.

Mira en independientes

Virgilio Hernández señaló que hay tres meses de trabajo del actual periodo, por lo que no descartan que legisladores independientes, con menos presión, respalden proyectos como el de Comunicación.

Otros proyectos prioritarios

Para María Augusta Calle son prioritarias a más de esa ley las de Aguas, Tierras y de Semillas.