Daniela Creamer
CANNES, Francia.- Con su larga melena dorada, perilla, bronceado y sonrisas, Brad Pitt reinó el pasado martes en la Croisette, al defender su reciente interpretación en el filme Killing Them Softly, del australiano Andrew Dominik, con quien ya trabajara en el 2007, en El asesinato de Jesse James por el cobarde Robert Ford.