Energía, romance y cierta dosis de erotismo conformaron la estrategia musical que el dúo Chino y Nacho utilizó para satisfacer a sus fans en el concierto que ofrecieron el pasado viernes. La constante interacción de los venezolanos con el público, sus dotes de bailadores y hasta de consejeros sentimentales hicieron que el público, conformado en su mayoría por jóvenes parejas, no dejara de cantar y bailar.

Antes de que el grupo apareciera en el escenario de la Feria de Durán, la cantante ecuatoriana Nicole Rubira amenizó la velada con la interpretación de su nueva melodía: Cuántas veces, los covers Addicted to you (Shakira), I will always love you (Whitney Houston), y terminó con su tema Esta es la señal. A las 21:25, los músicos que acompañaban al dúo calentaron los instrumentos y entre juegos de luces y humo aparecieron un Chino engafado y vestido de negro y su compañero Nacho, con sombrero y chaqueta morada.

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Le dieron alas a la música con Tu angelito y después de preguntar, con coquetería, por las señoritas que habían ido al concierto “sin compañía”, interpretaron Una vez más. De un lado al otro o en los bordes del escenario –para un mayor delirio de sus seguidoras–, los venezolanos mantuvieron en alto, hasta el final del espectáculo, su termómetro energético.

Video de María Belén Salinas, periodista de Diario EL UNIVERSO

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Ya para este tema el calor pudo más y Jesús Miranda (Chino), quien consta en la última lista de los 50 más bellos de la revista People en Español, se desentendió de su chaqueta. Él y Miguel Mendoza (Nacho) invitaron al público a caer en La Tentación, a la vez que se unían al grupo de baile que los acompañaba. Pronto dieron paso a Ese hombre soy yo.

Nacho también se sacó su chaqueta, dejando a la intemperie el gran tatuaje de su brazo derecho; y Chino enfatizó que actualmente está “disfrutando demasiado de su soltería”. Con esta afirmación, aclamada por sus fans, explicó que se venía el apartado romántico de la noche con una melodía que surgió luego de su ruptura sentimental: Me mata, me mata. Con otra versión de Mi niña bonita, tema que catapultó a los venezolanos, la fiesta prosiguió, mientras que un pequeño oso de peluche se camufló en el escenario. Fue un regalo del público que Chino recibió con agrado.

La música se detuvo para darle paso a las palabras de Nacho, que versaron sobre la interpretación que él y su compañero le dan a la belleza. “El físico se pierde con los años, pero la esencia queda siempre”, dijo, y añadió que tenían “cariño de sobra” para dar. “Eres una niña bonita”, finalizó Nacho, mientras señalaba con su índice a las asistentes que se encontraban en las distintas localidades.

En el repertorio pop tropical y reggaetonero constó, además, Sin ti y con El poeta, una de las canciones más especiales de la trayectoria de la agrupación, según Nacho, también improvisaron con un poco de bachata. En la interpretación de Regálame un muack, Chino, quien en ese momento lucía una camiseta roja, trajo consigo la bandera de Ecuador, acto bien recibido por los asistentes.

Lo que no sabes tú fue la excusa para que Nacho galanteara a las guayaquileñas, adaptando la letra del tema especialmente para ellas y Chino, otra vez con una prenda diferente –camiseta a rayas sin mangas–, hizo una serie de movimientos sugerentes e invitó a los asistentes a que también hagan movimientos sexis al compás de un ‘¡ay!’.

Luego todo se resumió en un Bla bla bla, pero no para una fan que logró subirse al escenario y abrazar a Chino. Minutos después Nacho, vestido de gris, recalcó que “a la mujer hay que tratarla como a una reina”.

El concierto pareció acabarse cuando el dúo entonó la primera versión de Mi niña bonita, pues Chino le lanzó su camiseta al público y los músicos, casi enseguida, empezaron a desconectar sus equipos. Pero la gente, quieta en sus puestos, pidiendo a coro que el dúo regrese con la típica arenga “una más”, logró su objetivo: Chino y Nacho aparecieron para interpretar la última melodía de la noche, Se apagó la llama.

Jesús Miranda llevaba puesta una camiseta de Ecuador y Nacho accedió, con ayuda de la seguridad, a abrazar a una fan que estaba en la primera fila. Eran las 22:55 cuando el show culminó. El ‘poeta’ y el ‘angelito’ hicieron de las suyas.

El concierto

La localidad golden se llenó, pero en tribuna y general no hubo gran afluencia de público. En total se vendieron 7.495 entradas.

Los asistentes ingresaron con normalidad.