La casa comunal de Engabao, que se levanta junto a la iglesia y al parque, en las tardes y noches se llena de algarabía. Acoge a niños y adultos, sobre todo mujeres, que asisten a los talleres que se realizan como parte de la Residencia Franja Arte Comunidad, que se inició el pasado viernes y culmina hoy. Es un proyecto que lidera la escultora guayaquileña Larissa Marangoni y cuenta con la curaduría de la historiadora de arte María Fernanda Cartagena.

Los artistas y activistas sociales que forman parte de la residencia y que desarrollan trabajos que se vinculan con la comunidad, son los facilitadores de estos espacios.

Publicidad

Así, por ejemplo, la ecuatoriano-estadounidense Libertad Gills, que alista un documental sobre las disputas territoriales de la comuna, ofrece talleres de acercamiento al video y de dibujo para los niños. La ecuatoriana Ana Fernández busca que a través del bordado las mujeres del lugar narren sus historias y, además, se reivindique el trabajo manual, de manera que sea una forma de encuentro, memoria y también de sustento.

Eduardo Martínez y Manuel Romero, del colectivo Minimal, de Colombia, ofrecen un taller de gastronomía en el cual buscan que los pobladores recuperen los alimentos e ingredientes de su entorno y propongan una cocina propia y creativa.

Publicidad

El coreógrafo José Gregorio Suárez realiza bailoterapia para niños, en las tardes; y en las noches para los adultos. También por las noches las integrantes del colectivo trans Cuerpos Distintos, Derechos Iguales, que dirigen Elizabeth Vásquez y Ana Almeida, ofrecen talleres, que comprenden prevención de enfermedades de transmisión sexual, derechos trans, y más. A estos talleres se suman el de Gráfica popular, que ofreció el artista Rubén Jurado. Muchos comuneros han pintado embarcaciones de pesca y junto con Jurado y el artista Jimmy Lara también dieron color a la glorieta de Engabao.

En las noches se intercambian experiencias sobre las actividades realizadas cada día y el avance de los proyectos.

Datos

Cinco estudiantes del ITAE asisten los proyectos.

El artista brasileño Fausto Wolfenbuttel, quien se enfoca en cómo mejorar los entornos, ideó una escultura con botellas y más materiales reciclados de la playa que conecta Engabao y Puerto Engabao. Trabajaron junto a él niños de dos escuelas y la artista rusa Olga Lugatenko.

.