AFP
XALAPA, México.- Los cadáveres de 35 personas aparecieron el martes en dos camionetas abandonadas bajo un puente vial en la zona metropolitana del puerto de Veracruz, este de México, en lo que el gobierno federal estimó pudo ser un ajuste de cuentas entre bandas de delincuentes.

Algunos de los cuerpos cayeron sobre la vía pública y otros quedaron en la parte trasera de las dos camionetas medianas de carga, cuyos depósitos enrejados habían sido cubiertos con plásticos azules, según un fotógrafo de la AFP.

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A las 22:30 locales del martes de los 35 cadáveres se habían identificado siete, todos con antecedentes penales, dijo el fiscal de Veracruz Reynaldo Escobar a la prensa.

"Apenas se ha identificado a siete y todos presentan antecedentes penales", informó Escobar. "Esto es algo que puede tranquilizar a la población, ya que todos tenían antecedentes penales", agregó.

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"Se dedicaban a actividades del crimen organizado, tales como secuestro, extorsión, homicidio y narcomenudeo", había señalado previamente el mismo Escobar en una conferencia de prensa en Xapala, capital estatal 400 km al este de Ciudad de México.

El lugar del hallazgo queda a 20 metros de una de las plazas más concurridas del municipio Boca del Río, de unos 140.000 habitantes en la zona metropolitana de Veracruz, sacudida este año por un incremento de la violencia y escenario de operativos militares dirigidos especialmente contra el cartel de Los Zetas.

En la capital, un alto funcionario de la Secretaria de Gobernación (equivalente al ministerio del Interior), señaló que probablemente se trató de una venganza entre grupos de delincuentes.

"Los datos que se tienen son suficientes para estimar que se trata de un tema entre bandas", señaló el subsecretario de gobierno, Juan Marcos Gutiérrez, a periodistas.

Los cadáveres son los de 23 hombres y 12 mujeres, dijo una fuente de la fiscalía de Veracruz a la AFP.

El fiscal Escobar descartó que los cuerpos correspondan a los presos que se fugaron en forma casi simultánea el lunes de tres cárceles de distintos poblados del estado de Veracruz, de los cuales 14 fueron recapturados.

"Todos deben pertenecer a una (misma) organización" delictiva, se limitó a decir. Varios medios de prensa señalaron que junto a los cadáveres se encontraron mensajes que señalan que las víctimas pertenecerían al cartel de Los Zetas, pero esto no fue confirmado por la Fiscalía.

Escobar le dijo a la prensa que todos los cuerpos presentaban huellas de tortura y que ya se analizan los videos de las cámaras de seguridad de la zona en busca de más información.

El puerto de Veracruz, uno de los más activos de México, se ha convertido este año en escenario de balaceras, quemas de taxis, ataques a civiles y del asesinato de al menos tres periodistas, que la han convertido en un nuevo foco de violencia en un país donde la ofensiva contra los carteles de la droga ha dejado 41.000 muertos desde 2006.

Autoridades judiciales estiman que la violencia en Veracruz se incrementó por el traslado de células del cartel de Los Zetas que huyen de las operaciones militares en el vecino estado de Tamaulipas, ubicado un poco más al norte y fronterizo con Estados Unidos.

Esa organización fue creada por militares de élite que desertaron en los años noventa para trabajar con el cartel del Golfo, con el que ahora se enfrentan.

Los Zetas se han extendido por la costa este mexicana desde la frontera con Estados Unidos hasta Guatemala, donde han sido acusados de masacres. La organización se financia además del narcotráfico, con el secuestro de migrantes, extorsión de comercios y robo de combustible, según el gobierno.

Las autoridades responsabilizan a Los Zetas del ataque que incendió el 25 de agosto un casino en la ciudad de Monterrey (norte) provocando 52 muertes. También de la matanza de 72 inmigrantes en un rancho de Tamaulipas en agosto de 2010.