Jorge Luis del Hierro recuerda que iba manejando su carro por la cdla. Nueva Kennedy cuando vio a un hombre, en su auto, pasándose el semáforo en rojo. Algo extraño le ocurrió, según asegura. Un ritmo rapero lo comenzó a invadir, y aquella cadencia venía también acompañada de un estribillo: “todo ha perdido su color, ha perdido su sabor, ha perdido su sistema”.