QUITO
.- La directiva de El Nacional busca cambiar la fisonomía de un club que en la temporada anterior tuvo escaso protagonismo en el campeonato ecuatoriano de fútbol; sin embargo, las limitaciones económicas y de mercado, hacen que los esfuerzos sean poco alentadores para el cuadro criollo.
A pesar del anuncio de un presupuesto que rebasará los $ 4 millones, que hizo el presidente militar Ángel Sarzosa, la realidad del armaje del equipo es otra y son más las bajas que las contrataciones que han realizado los militares, que pusieron la mira en jugadores de la segunda división (Tyrone Macías), serie B (Armando Angulo) y elementos que descendieron de la máxima división con sus equipos, como Juan Triviño y Hugo Vélez, que en el 2010 jugaron por Universidad Católica, de Quito.
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Al mando del uruguayo Mario Saralegui, el club rojo apostará por los elementos forjados en sus divisiones inferiores, "porque ya han jugado en el primer equipo, pero todo eso involucra el riesgo de que algunos no despeguen", dijo el estratega, que adelantó que con este equipo "será difícil pelear por el campeonato".
La solvencia económica es otro de los inconvenientes por superar de la directiva del club, que previo al inicio de la pretemporada, el 20 de diciembre pasado, se puso al día en los haberes atrasados con la plantilla.
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Sin contrataciones de renombre y con rostros jóvenes, el cuadro militar continúa con la pretemporada en busca de amalgamar un "equipo competitivo", que es el principal anhelo de Saralegui para este año.
El club de puros criollos, creado hace 46 años, no alza una copa desde el 2006.